Cinco ideas de negocio entre la genialidad y la locura

¿Cuál es la diferencia entre las ideas que llegan a triunfar y se transforman en unnegocio de éxito y las que fracasan?

Nunca se sabe cuándo puede llegar la inspiración, pero hay que estar preparado. Aunque se piense que el sentido común pueden ayudarnos a diferenciar entre una buena idea de la que puede surgir un negocio serio y seguro de una mala, lo cierto es que algunas de las mejores ocurrencias de la historia no podrían pasar ese filtro, pero han triunfado y hecho millonarios a sus inventores. 


1.- Tiritas. A Earle Dickinson un día se le ocurrió que, para evitar que su esposa tuviera que llevar incómodos vendajes cada vez que se hacía un corte cocinando, podía colocar un parche de gasa a un esparadrapo y pegárselo. Así se inventaron las tiritas, idea que registró en 1971. Sus tiritas eran del mismo color que la piel de su esposa, es decir, blancas. Se desconoce a ciencia cierta quién inventó las tiritas de color para las personas de raza negra, pero lo cierto es que fue otro éxito rotundo. Dos ideas sencillas, que aparentemente se le podían haber ocurrido a cualquiera, pero que triunfaron.  


2.- Harley Davidson. En 1901, William S. Harley y Arthur Davidson decidieron inventar una moto entre los dos. Finalmente, tuvieron que pedir ayuda del hermano mecánico de Davidson y , también, a algunos amigos para consiguir dar forma a su sueño. Los problemas fueron muchos, pero los salvaron con imaginación. Con tanta imaginación que para fabricar el carburador de la primera Harley utilizaron una lata de tomate. Un ejemplo de que, aunque la idea no sea original o pueda parecer una locura, puede dar sus resultados si se persevera lo suficiente.


3.- Un recuerdo eterno de tus seres querdios. A René Andrée se le ocurrió que, si el cuerpo humano está compuesto por un 20% de carbono y un diamante no es otra cosa que carbono cristalizado, un ser humano podría terminar convertido en esta piedra preciosa. Así que abrió una nueva línea de negocio y se dedicó a compactar las cenizas de los muertos para que sus seres queridos pudieran convertirlas en un diamante y conservar para siempre al fallecido consigo. 


4.- Alquiler de ataúdes. El negocio de las funerarias ha dado más de sí de lo que la gente podría sospechar. A la funeraria dublinense Rom Massey & Sons se le ocurrió ofrecer una alternativa para que las familias con menos posibilidades económicas redujeran el alto coste de un funeral, de forma que alquila un ataúd bueno, de mandera noble, para el funeral y, posteriormente, vente otro de menor calidad para incinerarlo mientras el de madera noble pasa a albergar a otro cliente. Sencillo y eficaz.


5.- Comprar una estrella. Si el Universo es infinito, los ingresos por vender estrellas no deberían agotarse nunca. Al menos, eso es lo que deberieron pensar en la compañía Global Star Registry que lleva desde 1979 localizando estrellas y registrándolas con el nombre que eligen sus clientes. Además, al comprar una estrella se recibe documento con sus coordinadas certificando el nombre que le has puesto. Bautizar una estrella cuesta 73 euros, pero la gente, los paga. 


Actualmente, todos aquellos que cuenten con ideas originales para comenzar a montar un negocio cuentan con la ventaja que supone el poder acceder a gran cantidad de información desde casa. En las llamadas plataformas de cursos se pueden encontrar ejemplos y profesionales que enseñan cómo crear un plan de empresa, para no comenzar sin una base sólida, y consejos para emprender un negocio.