A finales del 2013, el precio medio conjunto de la vivienda nueva y usada se sitúa en 1.307 €/m2 mientras que en 2007, año en el que se marcaron máximos, se alcanzaron los 2.401 €/m2. Asimismo, se observa que el descenso continúa siendo más importante en las viviendas de calidad baja (-17,4% anual) que en las de mejores calidades (-6,4%).

Así lo asegura en su informe del último trimestre del año la Sociedad de Tasación ST, consultora del sector inmobiliario que entiende que la tendencia en la evolución apunta a que seguirán bajando, al menos en el futuro inmediato.

En el caso de la vivienda nueva en edificio, los valores moderan su descenso en la segunda mitad del año 2013, observándose que el precio medio de las capitales de provincia se sitúa en 2.039 €/m2 desde los 2.212 €/m2 de 2012, lo que supone una reducción del 7,8% anual, mientras que el descenso en el segundo semestre del año se queda en el 3% desde los 2.102 €/m2 registrados en junio pasado.

Para la consultora, la dificultad para acceder al empleo y mantenerlo, la eliminación de incentivos fiscales para la adquisición de vivienda y el incremento del IVA a finales de 2012, así como la dificultad del acceso a la financiación han sido los principales factores externos que han impactado sobre el sector inmobiliario.