Los autónomos ganan terreno a los asalariados en el maltrecho sector de la construcción

El empleo en el sector de la construcción en Aragón ha experimentado en el último año (desde julio de 2012) una caída del 9%, según datos del avance del 'Informe de valoración de la Evolución anual del empleo en el sector del metal, construcción y afines en Aragón', presentado este jueves por el secretario general de MCA de UGT Aragón, José Juan Arcéiz, junto al secretario de organización de la Federación, Pedro Muñío, y el responsable de la misma, Manolo Grande.

En la actualidad, 30.000 personas trabajan en la construcción, de las cuales 17.162 son asalariados y 12.838 autónomos. Lo que según UGT supone "un trasvase" de trabajadores por cuenta ajena a cuenta propia.

A pesar de este movimiento, el número de autónomos no aumenta, al contrario, desciende un 3%. "No crecen en número pero sí en porcentaje respecto a lo que es el total de trabajadores en la construcción", concretó Arcéiz.

De hecho, la construcción es el sector en el que mayor pérdida de autónomos se han registrado desde junio de 2012. Según datos de la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores de Aragón (UATAE), de los 1.171 autónomos perdidos en este periodo, el 74,55% (873) se dedicaba a actividades relacionadas con la construcción. El bajón se acentúa en Zaragoza con 607 bajas.

Empeoran las condiciones de los trabajadores

Los sindicatos denuncian que la bajada continuada en la actividad está produciendo "una desregulación total y absoluta del sector de la construcción". "Se están cometiendo verdaderas tropelías con los trabajadores, obligándoles a aceptar condiciones muy por debajo del convenio", critican.

Además, Arcéiz denuncia que los "empresarios sin escrúpulos hacen mil y una fechorías que obligan a los trabajadores a firmar nóminas que no cobran, a devolver dinero al empresario en sobres, etc.".

Los trabajadores españoles tienen, según UGT, cada vez más dificultad para acceder a un empleo en la construcción porque los inmigrantes están más dispuestos a aceptar ese tipo de condiciones.

Arcéiz destacó que se está generalizando el salario de 1.000 euros con todo incluido, es decir, "vacaciones, horas extra y para los autónomos también su seguridad social y otros gastos". "Humillan al trabajador que se ve obligado a aceptar estas condiciones para tener un salario mínimo y degradan al sector de la construcción, que bastante degradado está ya", añadió.

Por estos motivos, desde el sindicato reclaman tener la tutela de los convenios, que ahora solo pueden negociar. "El sindicato conoce estos problemas de explotación pero no tiene el derecho a denunciarlo, lo tiene que hacer el trabajador y en la situación que estamos no se atreve a perder esos 1.000 euros de salario".

Causas de la caída

La principal causa de la caída del empleo en la construcción sigue siendo la falta de inversión pública. Según UGT, la única obra financiada por el Ministerio de Fomento en la Comunidad es la autovía Nueno-Congosto de Isuela, un tramo en el que "no trabajan más de 15 personas". "La conservación de carreteras de este departamento ha disminuido un 15% también en Aragón", explicó Arcéiz.

En cuanto al resto de administraciones, el sindicato resalta con su informe que solo se están haciendo pequeñas obras de emergencia con inversiones muy bajas o nulas. "En Zaragoza desde que se acabó el tranvía no hay ninguna obra ni infraestructura grande prevista para los próximos meses".

En la capital solo existen 10 obras de construcción residencial, industrial y de servicios y cuando se terminen las de Puerto Venecia y Arcosur, que están a punto de ser entregadas, "no hay licitaciones para nuevos proyectos".

La solución pasa por la inversión

Según el portavoz de UGT, el gobierno central y el autónomico tienen grandes temas olvidados que darían la posibilidad de generar empleo como por ejemplo: el desdoblamiento de la N-II y el de la 232, además de la mejora de los ferrocarriles y regadíos. "Ahora mismo ni están ni se les espera en cuanto a inversión", aseguró Arcéiz.

Una vez más el sindicato apuesta por un plan de rehabilitación de viviendas, ya presentado en el Foro de la Construcción, que "con una pequeña inversión pública podría generar mucho empleo". Además, reclaman un proyecto de conservación de carreteras.

"No vemos cerca la salida de la crisis y mucho menos la creación de empleo estable. Este es el panorama que tenemos que parece una repetición del año pasado -recuerda UGT-, pero si no tomamos medidas será otro año tirado a la basura en el camino a la recuperación".

"Hay que apostar por la industria y por una construcción dimensionada para no caer en los errores del pasado", añadió Arcéiz. "Un sector dimensionado pasa por inversión pública y privada sin dejar hueco a los especuladores. Hay que obligar a los bancos a prestar dinero a precio competitivo para que las empresas puedan funcionar. En Aragón se están escapando proyectos por falta de financiación y es un lujo que hoy en día no nos podemos permitir", concluyó.