El presidente de General Motors Europa (GME) y consejero delegado de su filial Opel, Karl-Friedrich Stracke, dimitió de ambos puestos, informó la compañía automovilística.

En un escueto comunicado, el fabricante de vehículos alemán apuntó que Stracke, quien accedió a estos cargos a lo largo de los dos últimos años, va a desempeñar a partir de ahora "tareas especiales", que no especificó.

El vicepresidente de GME y presidente del consejo de vigilancia de Adam Opel AG, Stephen Girsky, se hará cargo interinamente de la dirección de GME y convocará al consejo de vigilancia de Opel para la elección de un nuevo presidente.

El alemán Stracke, de 56 años, accedió a la dirección ejecutiva de Opel en abril de 2011 y a la presidencia de GME en junio de 2012, tras 30 años trabajando para ambas compañías.

Opel, propiedad de General Motors (GM), aprobó en junio un duro plan de saneamiento que apostaba por invertir en nuevos productos, reducir costes y ampliar mercados, a la vez que anunciaba una alianza con el consorcio automovilístico francés PSA Peugeot Citroën.

Esta estrategia no prevé el cierre de fábricas o recortes de plantilla, pese a las especulaciones en este sentido y a que Opel tiene un exceso de capacidades.