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El comité de empresa de Sali se reúne con Arturo Aliaga

Acompañados por el alcalde de Utebo, Miguel Dalmau, le expusieron al consejero de industria su preocupación por el ERE presentado por los nuevos dueños de la empresa.

Miembros del comité de empresa de la factoría de Leche Sali de Utebo, acompañados por el alcalde de esta localidad, Miguel Dalmau, se reunieron con el consejero de Industria del Gobierno de Aragón, Arturo Aliaga, este pasado viernes para exponerle la situación en la que se encuentran los trabajadores de esta factoría tras el expediente presentado por los nuevos dueños de la factoría y que significaría el despido de 60 de los 99 empleados con los que cuenta la empresa, según apunta una nota remitida por el comité.


El consejero de Industria del Gobierno de Aragón se comprometió a instar a la empresa a cumplir todos los compromisos que en su momento adquirió a la hora de adjudicarse la factoría, señala la nota.


El comité también se reunió el día anterior con el juez del Juzgado de lo Mercantil número 6 de Barcelona, que tramitó el concurso de acreedores de Cacaolat y adjudicó su unidad productiva a la alianza compuesta por las sociedades Cobega, la cervecera Damm y la especializada en reestructuraciones empresariales Victory . "Si bien en un principio el magistrado se mostró reticente a las explicaciones, conforme se le explicaba iba abriendo más las orejas y poniendo más interés” según palabras textuales de un miembro del comité de empresa.


El juez requirió más documentación y finalmente manifestó su intención de requerir a las empresas adjudicatarias para comprobar las informaciones recibidas.


Tras la reunión con el juez, los trabajadores celebraron una asamblea a la que también asistieron Dalmau, y la primer teniente de alcalde, Rosa Magallón. En el transcurso de dicha asamblea, los responsables municipales hicieron llegar, tanto al comité de empresa como a los propios trabajadores, el total apoyo de la corporación.


Los trabajadores de esta planta se sienten engañados ya que, según manifiestan: “No han cumplido absolutamente nada de lo que se comprometieron para la adjudicación de la empresa". El ERE de extinción presentado por la empresa y que afecta a 60 trabajadores hace inviable el funcionamiento de la planta que necesitaría un mínimo de 70 trabajadores para su correcto funcionamiento.