Voluntarios eternos

La estampa no puede ser ni sonar mejor: una semana como voluntario en las finales de la Copa de Europa de esquí alpino que se celebran del 13 al 19 de marzo próximo y tienen a la estación de Formigal como centro neurálgico de la prueba. Una vez más allí estarán los voluntarios de Peña Guara. El club oscense tiene una estrecha vinculación con la estación tensina desde que abriera sus puertas en 1965. Socios del club, siempre han estado cuando les han necesitado. Siempre para echar una mano como voluntarios.Y el próximo año tampoco faltarán. Eso sí, la bucólica idea de estar una semana de esquí en Formigal se desvanece cuando a uno le acercan el plan de trabajo. El despertador, como ocurriera en el Mundial Júnior de hace dos años, como en las pruebas que conforman Zagales, como en multitud de pruebas suena muy pronto; hacia las 4.00, y en pistas se está hacia las 5,45, con noche aún cerrada y temperaturas lo suficientemente bajas como para replantearse que de bucólico, ser voluntario, no tiene nada.

Manolo Bara, presidente de Peña Guara, cuenta orgulloso que el ánimo nunca decae. "Te toque derrapar, comunicaciones, llevar bocadillos al personal de la carrera, estar cogiendo tiempos de forma manual en la llegada, en la zona de salida, participan en las reuniones técnicas... Da igual, el ánimo siempre es bueno porque esto nos gusta", señala Bara. Es la organización del campeonato quien se encarga de dirimir los puestos que deben ocupar.

El calendario para inscribirse como voluntario para ser partícipe directo de las finales de la Copa de Europa de Alpino ya están abiertas, y el club sabe que, como mínimo, una decena de socios ya han cogido fiesta para poder ser voluntarios en esas fechas. Condiciones previas no hay. De hecho, tampoco es una obligación dominar las tablas para ir. El denominador común es tener ganas de echar una mano en lo que sea y sin horario.

La vinculación de Peña Guara con la organización de campeonatos en las estaciones de esquí aragonesas es de antiguo. Así, Manolo Bara echa la vista atrás para recordar cómo al final de la década de los 70 y principios de la de los 80 estuvieron en los llamados Juegos de Invierno que se concentraban en Jaca "y en la vieja pista de hielo se fusionaban las nieves de las cinco estaciones del Pirineo aragonés" y que sirvieron de embrión para lo que luego fue la Universiada de Jaca. "Como amantes del esquí, está claro que nos gusta colaborar", recalca Bara.

El hecho de que Formigal y Candanchú sean escenario de unas finales de Copa de Europa supone un mayor peso ya que el calado de la competición es superior al de otras pruebas. Esto implica la necesidad de más voluntarios y por eso, Peña Guara, con tiempo suficiente ya ha comunicado a sus socios la necesidad de captar voluntarios para subir a pistas en esas fechas. "La verdad es que si la gente se lo quiere pasar bien currando, ya sabe adónde puede acudir. Seguro que van a ser unos días intensos y duros", recalca Manolo Bara.