BALONCESTO

Una de ladrones y de altos vuelos

El Cajasol de Sevilla, que visita el domingo el Príncipe Felipe, es el conjunto que más capturas ofensivas acumula en la competición y posee a los dos jugadores que más balones roban de la liga, Calloway y Kirksay.

El 'cajista' Ivanov se impone a Guille Rubio en el salto por un rebote.
Una de ladrones y de altos vuelos
EFE

En el baloncesto siempre resulta más fácil ganar cuando tiras más que tu rival. Para ello hay que tener más posesiones que el adversario y esas se logran recuperando balones y consiguiendo rebotes ofensivos, las dos grandes especialidades del próximo enemigo del CAI Zaragoza, el Cajasol de Sevilla. El cuadro que dirige Joan Plaza es el que más capturas ofensivas acumula en lo que va de competición y en sus filas cuenta con los dos jugadores que más balones roban de la liga, Earl Calloway y Tariq Kirksay. De hecho, si no fuera por que sus porcentajes de acierto en los lanzamientos han sido bastante peores que sus rivales el balance actual de los andaluces en lugar de 2-2 podría ser mucho más favorable a sus intereses. Este domingo visitan el Príncipe Felipe en un duelo que será como una película, pero como una de esas de ladrones y de altos vuelos.


La resaca del histórico triunfo en el Palau Blaugrana se cura rápidamente analizando las cualidades del próximo oponente rojillo. Nada tiene que ver este Cajasol con el que se enfrentara hace dos años con el CAI en la elite. De todos ellos solo queda el pívot Juanjo Triguero y, además, este verano ha sido de los clubes que más y mejor se ha reforzado.


Su referente en ataque está siendo el amigo de DP, un rejuvenecido Louis Bullock que anota más de 16 puntos por encuentro. Pero sus verdaderos puntos fuertes están siendo la defensa, las recuperaciones y los rebotes ofensivos.


Sobre todo esas dos últimas facetas, en las que los de Plaza son unos auténticos especialistas y lideran las clasificaciones estadísticas de la ACB. La que más destaca es la de los rebotes de ataque. El Cajasol es el conjunto de toda la liga que más capturas ofensivas acumula, con una media de 15,7 por encuentro. Y entre los sevillanos hay un hombre, el ala-pívot Kaloyan Ivanov, que con 3,75 rebotes de ataque por partido es la mayor amenaza en ese aspecto de la competición. Se trata de un equipo de altos vuelos.


Eso sí, en el debe de los andaluces está que también son el conjunto que menos rebotes defensivos coge, por lo que ofrece algunas facilidades al rival.


En cuanto a los ladrones, la explicación es bien sencilla. En la plantilla 'cajista' existen dos jugadores que lideran la tabla de recuperaciones de la ACB. Se trata del base Earl Calloway y del alero Tariq Kirksay, dos de los pocos supervivientes de la temporada pasada.


Ambos han sido capaces de robar un promedio de 2,5 balones por jornada, algo en lo que solo les igualan el valencianista Claver y el base del DKV Joventut Robinson. Colectivamente el Cajasol es el segundo equipo que más recuperaciones suma, solo por detrás del Blancos de Rueda Valladolid. Los de Plaza roban una media de 10,7 balones.


Todo eso les otorga muchas más posesiones que a sus adversarios, aunque hasta la fecha no lo han sabido aprovechar, en gran medida por sus bajos porcentajes de acierto en el tiro.


Otro aspecto del juego que también les otorga más veces el balón en su poder es el de los tapones. La intimidación de los sevillanos pasa factura a sus adversarios, ya que colocan 3,2 'gorros' por encuentro, siendo el cuarto equipo más taponador. Sus especialistas son el propio Ivanov y uno de sus fichajes que debe ir a más, como el americano Paul Davis.


Aún no han ganado fuera

Las características de los hombres de Plaza les convierten en un conjunto a respetar. Sin embargo, el Cajasol todavía no ha sido capaz de vencer a domicilio en lo que va de temporada. De sus cuatro encuentros ha ganado los dos que disputó en su pabellón de San Pablo, ante DKV Joventut y Meridiano Alicante, pero cayó derrotado en sus desplazamientos.


En la segunda jornada perdió en la pista del Lagun Aro GBC y la pasada semana sucumbió en la cancha del Unicaja malagueño, un síntoma de que lejos de Sevilla el Cajasol todavía no carbura.


Ese será uno de los aspectos que deberá aprovechar el CAI si quiere derrotar a los andaluces en su visita del domingo al Príncipe Felipe. Eso, y dificultar los puntos fuertes de los de Plaza, es decir, cerrar bien el rebote para evitar sus capturas ofensivas; y mantener la concentración para evitar letales robos.