CAI ZARAGOZA

Una cuenta pendiente

El CAI se reencuentra el viernes con el Clínicas Rincón, el rival que le infligió una de las derrotas más dolorosas del ejercicio.

Sinanovic, el gigante del Clínicas Rincón Axarquía.
Una cuenta pendiente
DIARIO SUR

Hay derrotas y derrotas. Numéricamente cada traspié se contabiliza igual. Pero anímicamente unos golpean más que otros. Sin lugar a dudas, una de las bofetadas más dolorosas que ha recibido el CAI Zaragoza en esta irregular temporada fue la que le propinó el Clínicas Rincón en la cuarta jornada de la primera vuelta. Por inesperada y por ser infligida por el 'filial' de Unicaja. El encuentro del próximo viernes invita al desquite y a plasmar la auténtica distancia que separa a ambas escuadras.

 

"Perder frente al Clínicas Rincón nos dolió mucho. Teníamos el partido perfectamente controlado y se nos escapó de la peor forma. Sufrimos demasiados altibajos de concentración. Contábamos con esa victoria segura y no supimos responder a lo que exigía el rival. Son un equipo muy joven y anárquico, que juega prácticamente sin presión. Eso les convierte en peligrosos", comenta Edu Sánchez.

 

El base tiene marcado en su hoja de ruta la revancha con los 'cachorros' de Unicaja: "Aquella derrota fue una contrariedad y no la hemos olvidado. Ni se nos pasaba por la cabeza perder. Por eso debemos tomarnos muy en serio el encuentro del viernes y, sobre todo, no caer en los mismos errores. Con mentalidad y con defensa el triunfo no se nos puede escapar. Seguro".

Rincón de la Victoria, el hogar del Clínicas Rincón, contempló al CAI despistado y nada fiable que acostumbra a emerger lejos de tierras aragonesas. Únicamente Darren Phillip, con 22 puntos y seis rebotes, alcanzó un nivel aceptable. Otros estandartes como Paolo Quinteros, Matt Kiefer o Matías Lescano ejecutaron su versión más nefasta. Especialmente olvidable fue la actuación de la pareja de bases. Entre Pedro Rivero y Edu Sánchez apenas totalizaron cuatro puntos de valoración. Una de esas noches que anhelas desterrar y voltear.

 

Un parón positivo

Lamentablemente, estas cornadas no han sido una excepción en la trayectoria del conjunto de José Luis Abós. La última y más reciente se produjo ante el Cáceres, justo en la jornada previa al parón propiciado por la disputa de la Copa Príncipe entre Melilla y Menorca. ¿Cómo ha sentado el descanso competitivo al plantel rojillo? Edu Sánchez lo aplaude y regala optimismo: "Estas casi dos semanas nos han servido para reflexionar y para ver que no estamos en la situación que desearíamos. Hemos analizado en profundidad los errores y hemos llegado a la conclusión de que dependemos de nosotros mismos para alcanzar los objetivos que se merece la entidad. Eso no se consigue con palabras, sino trabajando, que es lo que hemos hecho. Hemos pulido muchos aspectos tácticos y técnicos y espero que se vean los resultados desde ya mismo. Los jugadores estamos convencidos de la reacción. Comenzamos el tramo final de la temporada y ya no valen los errores".

 

La pregunta del millón que revolotea en todos los estamentos del CAI Zaragoza aborda el desdoblamiento de personalidad que desnorta al equipo. De la invicta y temible escuadra al abrigo del Príncipe Felipe se pasa al desconcierto a domicilio, donde se acumulan seis reveses. ¿Existe alguna explicación? El 'playmaker' murciano ofrece alguna pista: "No creo que ganar en casa sea mucho más fácil que hacerlo fuera. Para conseguir ambas cosas tienes que estar los 40 minutos metido en el partido. Si te relajas, aunque sea muy poco tiempo, das vida al otro equipo y eso es gravísimo. No cabe duda de que mejorar lejos de nuestro pabellón es nuestra asignatura pendiente. Si lo solventamos, todos veremos el futuro con más optimismo".

 

Un futuro en el que acaba de entrar Oriol Junyent. El pívot catalán, con experiencia en LEB Oro y en ACB, aportará kilos, centímetros y acierto en la pintura. Una contribución que sus compañeros han recibido con satisfacción: "Oriol es un jugador muy experto. Domina el rebote en los dos aros, es muy grande y tiene muy buena mano. Todo aquel que viene a ayudar, es bienvenido. Los que estamos somos los que tenemos que llevar esta nave a buen puerto. Les pido a los aficionados que sigan confiando en nosotros".