El ex presidente del Barcelona Joan Laporta consultará en los próximos días la auditoría sobre su gestión hecha por la actual directiva, presidida por Sandro Rosell, pero duda en asistir a la asamblea de compromisarios de la próxima semana, ha señalado una fuente del entorno del ex mandatario.

Laporta, aspirante a la presidencia de la Generalitat en las elecciones del próximo mes, se enfrenta a un problema de dimensiones no cuantificables, después de que la actual junta directiva haya realizado una 'due diligence'(análisis completo del estado de la entidad) para comprobar el estado de las cuentas y de la gestión del club en los últimos años.

El dato más relevante es que la auditoría de cuentas refleja una millonaria pérdida de 70 millones de euros, frente a los once de beneficio que presentó el equipo económico de la anterior junta, liderado por el directivo Xavier Sala i Martín y el director general, Joan Olivé.

Por otra parte, algunas fuentes informativas han desvelado en las últimas semanas, aunque sin citar fuentes, que la 'due diligence' encargada por la actual junta directiva podría contener información que dejaría en una posición muy comprometida a la junta de Laporta por el tipo de gastos que se produjeron en los últimos años.

La directiva de Rosell, por su parte, se ha mostrado sorprendida por las filtraciones, y se ha limitado a subrayar que dará a conocer el contenido de la 'due diligence', aunque desconoce qué procedimiento utilizará.

De entrada, los socios compromisarios que deberán votar la gestión de Laporta y el presupuesto de esta temporada dispondrán de un período para consultarla, aunque también se habló de dejarla disponible para los socios en el sitio del club en Internet.

En este tiempo, Laporta tiene intención de acercarse a las oficinas del club para ver la auditoría, ya que no podrá tomar nota ni fotocopiarla.

A pesar de esta intención, Laporta no ha garantizado su presencia en la asamblea de compromisarios del día 16, en la que, aunque tiene derecho de asistir como ex presidente, no tendrá mayores derechos en el turno de palabra que cualquier compromisario.

Ante esta situación, Laporta, que está preparado su asalto a la presidencia de la Generalitat con un nuevo partido, 'Solidaritat Catalana, ha mantenido contacto con sus ex directivos, como el que se produjo anoche para estudiar la estrategia que seguirá de cara a la asamblea de compromisarios.

Una fuente de la reunión de ayer consultada por Efe ha asegurado que los ex directivos aún no se han decidido a comparecer ante los medios de comunicación la semana que viene, ya que todo queda a la espera de saber el contenido de la 'due diligence'.

Además, el grupo de Laporta ha preferido guardar silencio hasta que finalice la asamblea, especialmente en estos días, en los que se cumplirán cien días desde que Sandro Rosell alcanzó la presidencia del Barcelona, después de que accediese al cargo el pasado 1 de julio.