CAI ZARAGOZA

Todo se cocinó por dentro

El duelo entre Batista y Hettsheimeir fue de lo mejor del partido. El 'miedo' del CAI al uruguayo y las ayudas efectuadas provocaron espacios en el juego exterior y los triples locales decidieron el encuentro.

Mainoldi captura un rebote ante Hettsheimeir, Aguilar y Batista.
Todo se cocinó por dentro
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El partido se decidió por fuera, pero todo se coció por dentro. Era evidente. El mejor jugador de la liga hasta la fecha, el uruguayo Batista, era un arma demasiado peligrosa como para dejarle espacios. Además, enfrente tenía al rojillo más en forma, el brasileño Rafael Hettsheimeir. Su duelo fue un auténtico espectáculo, pero lo que realmente importó es que ese férreo marcaje al pívot local generaría unas ventajas que los de Salva Maldonado aprovecharon desde la línea de tres. Fue la salsa del partido, la clave del resultado. Los protagonistas lo reconocieron al final. Y es que el Fuenlabrada supo 'cocinar' esas canastas a fuego lento y terminó 'zampándose' a un CAI que ya piensa en el próximo banquete.

Lo curioso es que los de Abós plantearon así el encuentro porque hasta ahora la receta no le había salido nada bien a los madrileños. "La verdad es que Fuenlabrada ha jugado muy bien, han estado muy acertados desde la línea de tres. Llevaban malos porcentajes y hoy (por ayer) los han subido con creces. Ante eso lo único que podemos hacer es aprender a defender ciertas situaciones y que a jugadores como Mainoldi, Rabaseda, Guardia no les lleguen esos balones abiertos porque si tienen el día te la van a meter", comentaba sincero Pablo Aguilar al salir del vestuario.

El andaluz sabía que esa cancha era muy difícil, y por eso destacó que "el equipo ha luchado de principio a fin, hemos tenido esos pequeños momentos de falta de concentración y algunos errores que nos han costado esos triples y algunas canastas fáciles. Eso es lo que ha hecho que perdiéramos el partido. Tenemos que mejorar esto y que no se vuelva a repetir".

Aguilar se suele mover más por el perímetro, pero en la 'cocina', es decir, cerca de los fogones estaban tanto Hettsheimeir como un Chubb que esta vez no fue sólo un pinche sino que por fin se puso el delantal y trabajó bien.

"Era difícil, ellos han tirado muy bien y nuestra defensa no ha estado demasiado bien", reconocía el estadounidense. El pívot aprovechó la oportunidad, ya que "desgraciadamente Rafa se ha metido en faltas y he tenido tiempo para poder jugar mi juego. Espero seguir jugando y ayudando al equipo".

Chubb, antes de decidirse a pensar ya en el próximo duelo, habló de la actuación de Batista: "Es difícil defenderle. Es un jugador muy fuerte y muy listo. Sabe lo que puede hacer y lo que no".

El americano supuso un alivio para un Hettsheimeir que estaba muy solo hasta ahora en la pintura. "Adam siempre juega y entrena duro. En este partido ha dado un paso adelante. Tiene que adaptarse a la liga, pero va a ser un jugador importante", asumía el brasileño.

Volvió a ser el mejor en el CAI, y eso que le tocó bailar con la más fea, con un Batista que "juega bien dentro y también saca bien el balón fuera. Ha dado muchos tiros solo y las han metido. Es el jugador más valorado de la liga, pero no es el único que suma, ya que todos ayudaron".

El pívot insistió en que el Fuenlabrada varió su forma de jugar al mejorar sus porcentajes de acierto, "pero tenemos que defender más. Nos metieron más de 90 puntos y esos son muchos. Hay que ser más intensos atrás". A pesar de ello, se fue "con la cabeza alta. Estamos tranquilos y vamos a trabajar para intentar ganar al Caja Laboral en casa".