ASCENSO A PRIMERA

"Subiremos por K.O."

José Antonio López Bueno, doble campeón del mundo y actual campeón de España de peso mosca, acude a todos sus combates con la camiseta zaragocista

López Bueno posa con el cinturón de campeón del mundo y con la camiseta del Real Zaragoza que siempre le acompaña.
"Subiremos por K.O."
TONI GALÁN

El zaragocismo corre por las venas de José Antonio López Bueno. El doble campeón del mundo de boxeo nunca ha escondido su profunda pasión por el escudo del león. La prueba más delatora, la camiseta blanquilla que le acompaña absolutamente en todos los combates que ha disputado. La proximidad del ascenso, dispara el pulso del púgil.

 

"Va a ser una semana muy especial porque ya tocamos la Primera División con la punta de los dedos. Falta sólo un pasito y lo vamos a dar el próximo sábado. Va a ser un alivio y una alegría para todos", explica tras finalizar su entrenamiento matinal en el gimnasio Seúl.

 

Los recuerdos zaragocistas de López Bueno arrancan desde su infancia: "Recuerdo que iba a La Romareda con los amigos. Era un acontecimiento para todos y lo pasábamos muy bien. Me entra cierta nostalgia al recordarlo. Con los años, el boxeo me ha ido quitando todo el tiempo y le he prestado menos atención al fútbol y al Zaragoza. Pero siempre estás, en mayor o menor medida, pendiente del último resultado".

 

No fue niño de ídolos balompédicos, con la excepción de Emilio Butragueño: "Era un artista con el balón en los pies. ¡Cómo se movía! Parecía que bailaba".

 

En su disco duro vital habitan algunos de los grandes momentos de la historia reciente zaragocista, con un partido coronando el retablo, la consecución de la Recopa en 1995: "Aquel encuentro no se me olvidará en la vida. Todo lo que pasó fue mágico y difícilmente se puede superar el gol de Nayim, la forma más bonita de resolver una final".

 

Una emoción que también brotará si el sábado se produce en La Romareda el ansiado retorno a la elite, el territorio que nunca debería haber abandonado el club aragonés: "Ha sido una temporada complicada para todos porque la Segunda es una categoría muy dura. Por suerte, la vamos a dejar atrás. Subiremos por K.O. No tengo ninguna duda".

 

El homenaje más sincero de López Bueno a los colores zaragocistas tiene lugar en sus combates. Sale del vestuario en dirección al 'ring' ataviado con una camiseta y con un gorrito del Real Zaragoza, sus amuletos: "He peleado en Irlanda, en Alemania, en Francia, en dos peleas por el campeonato del mundo... En ningún sitio ha faltado la camiseta".

 

Una prenda que tampoco faltó en su reciente cita en Logroño contra Jordi Gallart, donde recuperó el título nacional de peso mosca. Ahora, su mente está en las tres veladas que organiza para promocionar el boxeo aragonés: el 20 de junio en Calamocha, el 27 en Aínsa y el 11 de julio en Montañana.