deportes de invierno

Roldán seguirá cuatro años más

La victoria en las urnas destapa las diferencias que hay en el seno de la Real Federación Española de Deportes de Invierno.

Imagen de archivo de Eduardo Roldán.
Roldán seguirá cuatro años más
SOLEDAD CAMPO

Eduardo Roldán seguirá cuatro años más al frente de la Real Federación Española de Deportes de Invierno (RFEDI). Ganó, tal como se intuía, las celebraciones celebradas ayer en Madrid ya que llegó al proceso electoral con muchos más avales que su contrincante, el madrileño Juan Ramón Blanco. Pero si toda victoria lleva aparejada una cierta alegría, Eduardo Roldán mostró ayer un estado diametralmente distinto al que se espera de quien acaba de ratificar en las urnas el trabajo hecho bajo su mandato y respaldado para cuatro años más. Sigue en tensión. "Todo esto me ha afectado más de lo que creía", dijo tras el proceso electoral, y reconoció que estaba en "un proceso de descompresión". Pero ¿por qué el triunfo fue tan amargo? Porque ganó, pero no arrasó. Y eso significa que lejos de una unidad pétrea, la RFEDI tiene síntomas de división; vías de agua que son necesarias taponar, cuando España, además, vía Zaragoza o Barcelona, quiere organizar una Olimpiada de Invierno.El también director de Candanchú se hizo con 28 votos, su rival con 17. Un estrecho margen para iniciar su tercer mandato al frente de los deportes de invierno. Un resultado que invita a un tiempo de reflexión. Por si hubiera alguna duda de cómo bajan las aguas, Eduardo Roldán recalca: "Creía que las cosas estaban bastante claras. Para mi, todo esto ha sido un periodo desagradable y está claro que todo lo ocurrido no se me va a pasar en 10 minutos".

El discurso de Eduardo Roldán no varía un ápice entre el día de antes y el de después de pasar por las urnas. "Considero que todo lo ocurrido era algo innecesario, y que alguien plantease una confrontación en una Federación que empezaba a caminar de forma cohesionada era innecesario", señala el reelegido presidente de la RFEDI, quien, con voz pausada califica hasta en dos ocasiones de "purga" lo ocurrido y añade que "puede ser hasta pedagógicamente buena, porque si no hubiese habido esta confrontación, igual no hubiera habido una aclaración de cómo están las cosas".

Eduardo Roldán entiende que los 17 votos obtenidos por su contrincante, y anterior vicepresidente de la RFEDI hasta que dimitió en 2009 con Eduardo Roldán en la presidencia, tienen su explicación "en los ofrecimientos que, tal vez hizo a una parte de la asamblea. Igual ha prometido cosas para sus aspiraciones, mientras que por mi parte yo no he prometido nada. Tan solo insistir en la misma línea constructiva con los deportes de invierno y, en todo caso, las líneas de renovación y futuro las plantearé ahora, no como promesas electorales porque eso no me parecería serio".

El periodo de reflexión por el que aboga Eduardo Roldán como resultado de la diferencia de votos en las urnas implicará que la constitución de la nueva junta directiva tardará aún un tiempo en constituirse.

Los principios sobre los que Eduardo Roldán quiere asentar su tercer mandato en la RFEDI descansan sobre dos ejes fundamentales. El primero es que la RFEDI tiene que ser el conjunto de las 13 federaciones que la conforman "y todas deben participar en la aprobación de proyectos y reglamentos que se pongan en marcha y además en primera persona, de tal forma que nadie se sienta marginada". El segundo punto de su gobierno es el "absoluto convencimiento" de la necesidad de "dar más escenario a los técnicos de las federaciones autonómicos, porque son expertos, muy profesionalizados y sus opiniones deben estar en primera línea de asesoramiento".

Eduardo Roldán defiende una junta permanente para que aborde todos los temas y posteriormente los traslade a las federaciones autonómicas.