REAL ZARAGOZA

Rebelión en el vestuario

Los jugadores se plantan y exigen al club los pagos debidos. Los capitanes pidieron reunirse con Agapito, que les envió a Prieto.

Rebelión en el vestuario
Rebelión en el vestuario
VíCTOR LAX

La plantilla del Real Zaragoza dio ayer un delicado paso en su relación laboral con la SAD y con su presidente, Agapito Iglesias. Gabi, Ponzio y Jorge López, los tres capitanes, en representación de todo el vestuario, solicitaron una reunión directa, cara a cara, con el accionista mayoritario para abordar el espinoso asunto del retraso en el cobro de sus emolumentos. Sin embargo, Agapito no consideró conveniente dicho encuentro y optó por delegar en su director deportivo, Antonio Prieto, que fue quien finalmente se acercó a la Ciudad Deportiva en nombre de la sociedad anónima deportiva para entablar conversaciones con los cabezas visibles de la plantilla de futbolistas.

Los tres jugadores, el ejecutivo de Vallecas y el entrenador, Javier Aguirre, acabaron componiendo el elenco de esta atípica cumbre, que se desarrolló en el vestuario del técnico mexicano. Los cinco entraron con rostro serio al habitáculo a las 11.50 de la mañana, nada más acabar el entrenamiento. A eso de las 12.30, tras 40 minutos de conversaciones secretas, los tres capitanes abandonaron el encuentro. Aguirre y Prieto se quedaron solos hasta las 12.54, hasta completar más de una hora de devaneos sobre una cuestión que amenaza con horadar hasta el derrumbe a un equipo que, deportivamente, ya está muy malherido. El ambiente que se respira a estas horas en la relación entre jugadores y club es tenso, extraño, propio de situaciones límite que hasta ahora no se conocían en la historia moderna del Real Zaragoza.

Los problemas de cobro de los pagarés extendidos por la SAD en los últimos meses parece que están en el fondo de esta situación tan compleja. A este respecto, ayer se impuso una densa cláusula de confidencialidad sobre lo que en la reunión se trató. Nadie quiere revelar explícitamente el contenido de la cita entre los capitanes y el director deportivo, con el entrenador por testigo.

El presidente y accionista mayoritario, Agapito Iglesias, reconoció ayer que hay tres pagarés del pasado ejercicio que se debieron atender el día 10 y que aún no se han podido satisfacer. Quedan pendientes -según se acordó con la plantilla- los pagarés del primer semestre de la actual temporada. El retraso que se acumula a este respecto sigue siendo de seis meses, como reveló en su momento Ander Herrera en una entrevista radiofónica de ámbito nacional.

Por su parte, Javier Porquera, director corporativo, quien lleva directamente el gobierno de los asuntos financieros de la entidad, señaló (ya lo hizo hace una semana) que le resulta extraña esta actitud de la plantilla dado que la mayor parte de los jugadores tienen el dinero de los pagarés ingresado en sus cuentas corrientes desde hace meses gracias a un convenio que el club logró con Cajalón para que adelantara el monto de ese desembolso, corriendo el Real Zaragoza con los gastos de esa operación y de sus intereses resultantes.

Sin embargo, fuentes consultadas por HERALDO indicaron que la situación es más delicada de lo que apuntan los principales ejecutivos y el presidente del Real Zaragoza. De acuerdo con las mismas fuentes, las demoras podrían estar afectando al pago de las mensualidades, situación que -se sospecha en los despachos del club tras ver la actitud de diversos jugadores- podría estar detrás del bajo rendimiento mostrado en la última jornada en Cornellá, donde el Espanyol se impuso 4-0 con absuluta comodidad. Al parecer, el plante de ayer podría tener continuidad más adelante de no mediar una solución inminente. Incluso podría afectar de alguna manera al desarrollo del siguiente encuentro, al vital partido del sábado en La Romareda frente al Levante (así lo habrían llegado a sugerir varios componentes del equipo). También se apuntó en este sentido que varios miembros del plantel estarían en la intención de presentar ya mismo una denuncia por impago ante la Liga de Fútbol Profesional (LFP).

Agapito Iglesias negó anoche cualquier validez argumental a este discurso. Indicó que el Real Zaragoza está al corriente con su futbolistas en el pago de los salarios. Negó, por tanto, la mayor. Asimismo, Agapito indicó que no quiere ni pensar que estos problemas que ayer emergieron en la caseta puedan tener relación con el mal resultado de Barcelona. "¿Acaso -dijo- cabe aplicar este razonamiento en sentido inverso. Es decir, los jugadores siempre ganan los partidos cuando se les paga?". El presidente aseguró a este respecto que si tuviera la seguridad de que, en algún momento, las cosas fueran así adoptaría medidas enérgicas. Iglesias indicó que él mismo, hace varias fechas, trasladó a Gabi, como capitán, su ofrecimiento de atender personalmente cualquier necesidad que puedieran tener los tres jugadores que no pudieron cobrar el lunes el pagaré de la pasada temporada. Para la semana próxima -indicó- espera tener resuelta esta cuestión. Mientras tanto, el ambiente interno ha estallado.