REAL ZARAGOZA

La juez permite a los pequeños accionistas entrar en el concurso

La juez encargada de conducir el concurso de acreedores ha dado la razón a los pequeños accionistas, desestimando el recurso del Zaragoza y permitiéndo a la APARZ tener acceso a los movimientos del club.

Agapito Iglesias, flanqueado por Francisco Checa y Javier Porquera, los tres actuales componentes del Consejo de Administración
La juez permite a los pequeños accionistas entrar en el concurso
TONI GALÁN

La Asociación de Pequeños Accionistas del Real Zaragoza (APARZ) ha conseguido,tras una larga pugna judicial, personarse de forma definitiva en el concurso de acreedores del club aragonés. Después de conseguir su objetivo el pasado 5 de septiembre, los accionistas minoritarios recibieron, el día 19 del mismo mes, la noticia de que la entidad presidida por Agapito Iglesias había presentado alegaciones, dentro de los 5 días hábiles de que disponía, para evitar el objetivo de la APARZ.


Casi dos meses después, la magistrada María del Carmen Villellas, titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Zaragoza y encargada de conducir el proceso, ha dado finalmente la razón al consorcio de pequeños accionistas, quienes no dudan en tildar de “éxito” la decisión de la juez.


En palabras de Javier Lainez, vicepresidente de la APARZ, se trata de una noticia “importantísima”, ya que “permitirá saber qué pasa dentro del club”, un “derecho que tienen los más de 13.000 accionistas” del equipo zaragozano, “así como toda la masa social”.


Es una medida que podría crear un precedente en el fútbol español.

Volver al modelo de Club Deportivo


Sobre la posibilidad de que los clubes españoles -en su mayoría Sociedades Anónimas Deportivas, a excepción de Athletic, Barcelona, Madrid y Osasuna- puedan volver al modelo de Club Deportivo, Lainez asegura que esta es “una guerra que depende del Consejo Superior de Deportes y de la nueva Ley del Deporte, de la que hay un borrador que así lo recoge”. Esto, asegura, “permitiría una mayor democracia interna y un férreo control en las cuentas de los equipos”.