Fernando Meira y Franco Zuculini han sido presentados como nuevos jugadores del Real Zaragoza. Mero formalismo, claro, debido a que ambos ya se han entrenado con la primera plantilla e, incluso, el medio argentino formó parte del once inicial que disputó el Trofeo Ciudad de Zaragoza el pasado lunes.

Un debut sobre el tapete de La Romareda del que se ha declarado satisfecho. «Solo estuve 2 días entrenándome pero me entendí bien con mis compañeros. Quizás me hace falta algo más de ritmo para meterme más en el equipo y la forma de juego que quiere el míster en mi posición. Pero lo cierto es que me sentí muy cómodo y pude cumplir todas las órdenes que el entrenador me dio en el campo», ha afirmado el centrocampista.

En su demarcación tendrá la compañía de su compatriota Leo Ponzio. «Compartir el medio campo con él me ayuda mucho ya que es argentino, lleva mucho tiempo en el club y es el capitán», ha dicho al respecto.

Meira, por su parte, sabe que su lugar se encuentra más retrasado. En la zaga, a la que ha llegado para ser faro y aportar experiencia. «Quiero ser uno más para ayudar al equipo y que no encaje tantos goles como en las últimos años. El objetivo es ofrecer una temporada tranquila a los aficionados», ha declarado tras reconocer que necesitará algo más de preparación tras haber superado recientemente una lesión que le tuvo tres meses en el dique seco.

Para ello, podría contar con la ayuda indirecta de la huelga convocada para las 2 primeras jornadas ligueras. Un tiempo extra al que el central luso no ha querido dar demasiada importancia. «Si tenemos una semana más para entrenar será mejor, pero si ha que jugar el sábado estaremos listos», ha relatado.En busca de una oportunidad

Pese a su diferencia de edad, uno casi acaba de comenzar su carrera en el fútbol mientras que el otro camina sus últimos pasos, ambos han llegado hasta Zaragoza con la intención de contar minutos y reivindicarse.

Zuculini, que a sus 20 años ya ha pasado por el Hoffenheim alemán y el Genoa italiano, lo tiene claro. «Vengo aquí en busca de continuidad, pero sé que eso me lo debo ganar yo», ha asegurado de manera tajante. Una idea con la que cuenta Meira, que tras rescindir su contrato con el Zenit ruso ha firmado un contrato por dos años. «He llegado para ayudar porque allí no he jugado mucho», ha afirmado.

Tras sus declaraciones, ambos futbolistas han salido al verde de La Romareda para ser agasajados por las decenas de aficionados que se han acercado hasta el estadio municipal. Un recibimiento aderezado por las altas temperaturas que han azotado la ciudad durante toda la jornada.