REAL ZARAGOZA

Ponzio y Messi, Leo al cuadrado

Los dos argentinos, ambos de Rosario, comparten admiración y amistad.

Leo Ponzio y Leo Messi, en Basilea en 2006.
Ponzio y Messi, Leo al cuadrado
HERALDO

De Leo a Leo. De argentino a argentino. De rosarino a rosarino. De amigo a amigo. El partido de mañana en La Romareda volverá a juntar a Ponzio y a Messi, dos futbolistas unidos por el cariño y por su procedencia. Aunque, debido a su carácter ultracompetitivo, sus afectos quedarán encerrados en el vestuario durante 90 minutos.


"Claro que conozco a Leo desde hace años. Incluso de antes que nos encontráramos personalmente. Yo vi jugar a Leo cuando militaba en el primer equipo de Newell's Old Boys (Messi militaba en las inferiores de dicho club). Era un jugador muy querido y se veía que llegaría muy lejos. Aunque, eso sí, a quien más admiraba era a Pablo Aimar", rememora Messi.


Jamás coincidieron en el equipo de su ciudad. "¡Si cuando yo era futbolista profesional, él era un niño de diez u once años!", dispara el zaragocista.


Pero sí lo hicieron en marzo de 2006 en la selección argentina en un amistoso frente a Croacia que se disputó en Basilea. Ponzio, junto a los hermanos Milito y Maxi Rodríguez fueron el escudo protector del benjamín y estrella en ciernes. Volvieron a coincidir en una convocatoria posterior en Londres, donde curiosamente estuvo Pablo Aimar como jugador blanquillo.


La conexión entre los Leos es total. No dudan en regalarse elogios y en dedicarse gozosos deseos. Comienza Messi: "El Real Zaragoza siempre nos lo pone complicado, especialmente en La Romareda. Leo contribuye a ello. Nunca se da por vencido. Defiende con fuerza e insistencia y se incorpora al ataque. Es un gran jugador de equipo".


La postilla, para Ponzio: "Pocas cosas puedo añadir de Messi que no se hayan dicho ya anteriormente. Es un jugador especial y diferente y que, afortunadamente, es argentino".