REAL ZARAGOZA

"Nuestros rivales también juegan extramotivados"

Marcelino envía un mensaje al Rayo y al Hércules y reclama prudencia de cara al ascenso

Marcelino imparte órdenenes ante la mirada de su ayudante, Rubén Uría.
"Nuestros rivales también juegan extramotivados"
oliver duch

Prudente, comedido, realista? Marcelino no admite el optimismo desaforado e inyectó ayer unos miligramos de cautela al camino hacia el ascenso. Se han estirado las distancias con los perseguidores, Hércules y, sobre todo, Rayo Vallecano, pero las cuatro hojas que aún cuelgan del calendario obligan a sujetar la euforia y a medir los pasos. "Cuanto más cerca estemos del ascenso, más lejos se te puede ir. Tenemos que seguir tomando cada partido como una final. Lo importante ahora es ganar al Albacete y si coincide otra vez que los resultados de los rivales son favorables, mucho mejor. Pero, sobre todo, debemos centrarnos en este partido, con la ayuda de la afición y un ambiente fenomenal de nuestro lado, lo saquemos adelante", advirtió el entrenador del Real Zaragoza. Su mensaje prudencial no abandona el guión de las semanas previas y enfatizó que la plantilla mantiene la tensión: "Es difícil percibir el grado de optimismo de la gente. Venimos de una racha muy buena, por fin los resultados de nuestros adversarios directos nos favorecieron y ganamos fuera con un resultado contundente y buen juego, y eso aumenta el optimismo. Pero no debemos perder la realidad, y saber que el partido ante el Albacete será diferente y ante un rival igual de extramotivado que los que se encuentran nuestros rivales y tanto están diciendo?"

 

En ese punto, las primas, los maletines, las elucubraciones, las teorías de la conspiración y todas esas acusaciones sin demostrar espoleadas desde Rayo Vallecano y Hércules coparon el interés. Marcelino comenzó a disparar: "Esto siempre coincide cuando tus rivales directos ganan y tú pierdes. Los equipos a los que nos enfrentamos están igual de extramotivados que los suyos. Hay veces en que vendes la piel del oso antes de cazarla y, cuando la situación se pone adversa, buscas la responsabilidad en el lado ajeno. Nosotros estamos al margen y estas manifestaciones no nos van a descentrar de nuestro objetivo".

 

Marcelino alargó la explicación: "Nosotros (los equipos de cabeza) somos quienes nos jugamos el ascenso y la culpa no es que los rivales estén primados. Si antes has sido capaz de ganar partidos por ti mismo y luego no, tampoco se pueden decir cosas que no vienen a cuento. Pero nosotros debemos centrarnos en el Albacete para ganar tres puntos con los que daríamos un gran salto".

 

Con o sin ayudas exógenas, Marcelino espera el resbalón mortal del Hércules ante el Celta: "Nosotros nos centramos en los nuestro. Pero sería muy positivo ganar y que, sobre todo, el Hércules nos diera seis puntos. Se mide a un rival que se juega cosas muy importantes". Sobre las aspiraciones del Rayo Vallecano, el técnico del Real Zaragoza fue tajante: "Dependen de que fallemos nosotros y de que falle el Hércules. A falta de 12 puntos, están obligados a ganarlo todo, incluido a nosotros en el último partido, y que el Zaragoza falle en dos partidos de cuatro. Y eso es muy complicado. Imposible no, pero muy difícil".

 

Marcelino recordó en qué tejados está ahora la pelota: "El Zaragoza tenía obligaciones desde el primer partido, una presión tremenda que hemos soportado como profesionales. Y en el resto de los rivales, pasan los meses, se habla del ascenso con la boca pequeña, pero los resultados te colocan ahí, ante una obligación. Y en esa situación hay equipos que responden mejor que otros. Nosotros tenemos ventaja porque convivimos con la presión desde el principio".

 

El Zaragoza, al margen de lo que ocurra en campos ajenos, deberá hablar en términos de victoria ante un Albacete salvado y liberado de urgencias. "Es un equipo complicado. Se repliega con rapidez, con bastante gente y tienen un buen contraataque. Para nosotros es positivo que ganara la semana anterior porque ya no tiene ningún problema con el descenso", reconoció Marcelino.