VOLEIBOL

Multicaja, listos... ¡ya!

El Múlticaja Fábregas Sport madrugó y se puso ayer el traje de faena. El subcampeón de la Copa del Rey, tras recuperar su plaza en la elite nacional, se presenta con renovadas ilusiones y siete caras nuevas.

La plantilla y el cuerpo técnico del Multicaja Fábregas Sport, ayer en las pistas del Centro Aragonés del Deporte en el Actur.
Multicaja, listos... ¡ya!
GORETTY VáZQUEZ

Aquien madruga Dios le ayuda". Paco Díaz recurre al refranero popular, incluso a recuperar la fe ante la Virgen del Pilar, para que esta temporada su Multicaja Fábregas Sport no sufra como la pasada campaña. Por eso ayer, a las diez en punto y con un sol de justicia, catorce jugadores ya lucían pierna en el Centro Aragonés del Deporte dispuestos a afrontar la primera de las largas sesiones de entrenamiento que se sucederán durante ocho meses, cuando se ponga fin a una edición más de la Superliga. Las plegarias, y la preocupante situación económica de varios clubes, obraron el milagro: el Multicaja fue restituido el pasado julio a su sitio, la élite, después de estar descendido unos meses antes por méritos propios a la segunda división nacional. Por eso, el incombustible Díaz ('tira más un banquillo que el sentido común', aforismo de reciente creación) ha querido ser precavido para evitar caer en los errores que culminaron antaño en el desastre del descenso.


"El año pasado empezamos mal, con la mitad de jugadores, problemas con los transfer de los extranjeros..., y todo se torció. Cuando reaccionamos, ya fue demasiado tarde. Esta campaña había que cambiar la dinámica", señala el preparador. Aunque el poso amargo que dejó el bajar de categoría se endulzó con la brillante Copa del Rey que organizó, y que culminó con una histórica final ante el Unicaja Almería. El conjunto andaluz sudó para llevarse el título, y el Multicaja se comportó en la pista como un conjunto peleón y aguerrido, la filosofía que Díaz quiere que perdure este año.


El Club Voleibol Zaragoza (pasión de aficionado en un mundo pseudoprofesional) ha conseguido cuadrar los números. El presupuesto sigue siendo modesto (no llega a los 300.000 euros), pero los nombres que visten a la entidad todavía mantienen la confianza, aunque en las últimas campañas el cesto presente menos billetes. Al igual que las instituciones (Gobierno de Aragón, Ayuntamiento, Diputación), siempre con un sí en el discurso, pero condicionado (la crisis..., ¡ah¡, el desembolso pasado un largo año). "Somos lo que somos y no podemos llegar a más. Pero si algo no nos falta es ilusión y ganas de trabajar, la bases con las que siempre partimos. No nos vamos a lanzar a cosas descabelladas. Cada partido no colocará en nuestro sitio, y si nos podemos dar una alegría, como con la Copa, pues bienvenida sea", comenta Díaz.


Con el reto de la permanencia como primera premisa del quinto proyecto, siete fichajes dan cuerpo a una plantilla en la que se mantienen el colocador Ángel Sánchez, el central Adrián Fidalgo, el receptor brasileño Diego Guardiano y el opuesto Rubén Calonge, la perla del voley zaragozano, veterano de guerra que estrena galones de capitán. El mercado ha sido generoso y en el mismo 'pack' ha juntado a un trío de brasileños que promete samba en la pista: Paulo Enrique Araujo (central), Edson Barbosa (receptor) y Thiago Maciel (opuesto). Además, en el mismo vuelo aterrizó, con envidiable moreno, el central argentino Ignacio Batallán. Y del producto nacional sobresale el director de juego Víctor Viciana, el receptor Manuel Crespo y el líbero Carlos Cuesta. Sin olvidar a hombres de casa, los juveniles Adrián Nicolás, Ricardo Pérez, Javier León, y la aportación de los canteranos Pablo Fernández, Miguel Falo y Jorge Pellicena. "Hemos intentado compensar la plantilla en todas las facetas y con jugadores jóvenes. Vamos a tener que asumir responsabilidades desde el principio, y los extranjeros son una incógnita saber cómo se adaptarán", valora Díaz, que estará apoyado en el banquillo por Diego Carreras y David Cabrerizo. Rubén López (fisio), Beatriz Meseguer y Laura Herrero completan el cuerpo técnico.