CAI ZARAGOZA

Miso: «El CAI ya no está en la LEB, debe cambiar de mentalidad»

El madrileño se marcha dolido por no haber demostrado su calidad y recomienda una reflexión dentro del club.

Andrés Miso en acción de tiro durante un encuentro.
Miso: «El CAI ya no está en la LEB, debe cambiar de mentalidad»
JOSé MIGUEL MARCO

¿Por qué no sigue Andrés Miso en el CAI Zaragoza?

Esa pregunta se le debería hacer al director deportivo y al entrenador que son los que deciden en el tema de los fichajes. Yo le comuniqué al club que mi prioridad era seguir en el CAI y ellos me dijeron que se pondrían en contacto con mi agente para llegar a un acuerdo. A día de hoy mi agente lo único que me ha comunicado con respecto al CAI es que a partir del día 1 de julio era libre para negociar con otros equipos. En ningún momento se ha tratado el tema económico ya que no hubo ningún tipo de negociación.


¿Cómo se siente una vez fuera de la entidad aragonesa?

En verano cuando llegué a Zaragoza, mi intención era ayudar a que el club se asentara en la ACB por muchos años, que Zaragoza volviera a vibrar con su equipo en la elite. Venía para formar parte de este proyecto a medio-largo plazo y estar allí muchos años. Me da mucha pena irme ya que me he sentido muy a gusto en la ciudad, con la afición y con la gente que me ha rodeado. Me llevo un gran recuerdo y muchos amigos.


Eso parece que ha sido lo mejor, la ciudad, la gente...

La ciudad me gusta, está cerca de Madrid, y me ha sorprendido mucho el carácter de la gente, muy amable y servicial. He conocido mucha gente que merece la pena, gente auténtica. Y eso es lo que me llevo.


Tras más de una década en la ACB, ¿qué es lo que más le ha llamado la atención de este club?

Es un club con mucho recorrido y que si se hacen bien las cosas se podrá ver a un CAI dentro de no mucho tiempo compitiendo por cotas más altas. Pero se deben de hacer bien las cosas y saber que ya no se está en LEB. Se está en ACB y eso requiere un cambio de mentalidad. Otra cosa que me ha llamado la atención es la poca libertad de expresión que se da a los jugadores. Sin ir más lejos, yo me quedé sin jugar en Alicante por unas declaraciones que hice. Pienso que este tipo de cosas se pueden solucionar de otra manera sin que afecten a lo puramente deportivo.


¿Se siente frustrado por no haber podido demostrar su calidad?

Por supuesto que sí. Vine al CAI para ser un hombre importante y salvo algunos partidos, he sido un hombre de rotación. El año pasado en un equipo que quedó quinto en la liga, clasificándose para la Copa del Rey y el 'play off' me sentí mucho más importante que este año.


¿Qué le ha impedido sacarla a relucir?

Creo que cuando he tenido continuidad y he jugado de dos y de uno, que es a lo que vine, he demostrado que podía ser muy útil para el equipo, pudiendo ayudar en las tres posiciones exteriores. No cabe duda de que uno de los más afectados en minutos de juego con la llegada de Carlos (Cabezas) fui yo. Y eso también ha podido influir. De todos modos soy autocrítico y pienso que siempre se puede dar más, y buena parte de la culpa de no haber rendido a un nivel superior es mía.


Ha tenido roces con el entrenador que le supusieron algún castigo y alguna multa. ¿Qué pasó?

Realmente sólo tuve un roce que se saliera de lo normal y ocurrió en un entrenamiento cuando me pareció que se me faltó al respeto. Tuve una reacción en la que perdí las formas y luego vinieron las consecuencias. Pedí disculpas por mi reacción, asumí el castigo y José Luis (Abós) lo entendió. Lo que más me dolió de este tema fue que se dijera en algunos medios que yo no había jugado en Bilbao porque mis entrenos no eran buenos y porque mi actitud había sido muy mala durante un tiempo.


¿Qué le dice el nombre de José Luis Abós?

Me parece que es un entrenador que tiene la oportunidad de estar muchos años al frente de un proyecto importante, que tiene un gran respaldo por parte del club, y que, como a todo debutante en la competición, le queda mucho que aprender. La experiencia le hará ser un buen entrenador.


¿Si volviera un año atrás, ficharía de nuevo por el CAI?

Uno tiene que ser consecuente con sus decisiones, pero sí que es cierto que el año en el plano individual no ha sido como yo esperaba. Hay momentos que repetiría con los ojos cerrados y otros que me gustaría que no hubieran ocurrido.


Sin usted y sin Quinteros el CAI pierde mucho peso exterior.

Es cierto que sobre todo Paolo será un hombre difícil de sustituir, porque es un jugador que le ha dado mucho a este club, pero los ciclos se acaban. El mercado es muy amplio y seguro que los que vengan lo harán muy bien.


¿Lo que más le duele es que quede una imagen de usted de poco profesional y conflictivo?

Llevo diez años en ACB y jamás tuve un problema con nadie, jamás pagué una multa y nunca nadie podrá decir que yo no me dejo la vida en cada entreno. Me podrán acusar de otras cosas pero no de conflictivo y de poco profesional. Este año he tenido que pagar dos multas y me he quedado por castigo dos partidos sin jugar. No digo que no me lo haya merecido, pero habrá que reflexionar sobre el porqué de mis reacciones, ya que nunca tuve este tipo de problemas.


Un último mensaje como rojillo.

Dar las gracias a todos los que hicieron posible que viviera esta experiencia, dar las gracias a la afición, a todos los que me han apoyado y desearle al CAI mucha suerte en el futuro.