Micael y Postiga son titulares con Portugal

Todavía no han debutado con la camiseta blanquilla pero ya han despertado una gran expectación a su alrededor. Ruben Micael y Helder Postiga son dos de los fichajes del Real Zaragoza llamados a revolucionar el ataque del conjunto aragonés. Dos nuevos compañeros de vestuario que, además, coinciden en la selección portuguesa.

El combinado luso se midió ante la débil Chipre, a la que vapuleó en el marcador aunque no sobre el terreno de juego. Los dos zaragocistas fueron alineados en posiciones cercanas, Postiga como 'nueve' y Micael de mediapunta, ejerciendo casi de segundo delantero. Sin embargo, no interactuaron mucho entre sí. Una situación favorecida por la gran presencia que en Portugal tienen sus extremos, Nani y Cristiano Ronaldo.

Conexión interrumpida

Hubo un momento para la fantasía. Un intento de conexión entre los dos compañeros que, a buen seguro, podrán perfeccionar en la disciplina dirigida por Javier Aguirre. Fue al límite de los primeros 45 minutos cuando Micael buscó, en el área y de tacón, a su nuevo socio. La ocasión no llegó a buen puerto pero es el inicio de lo que debe ser una fructífera relación para el Real Zaragoza.

Por lo demás, ambos futbolistas estuvieron en su papel. Postiga se mostró muy activo durante los 75 minutos que jugó, hasta que fue sustituido por Hugo Almeida. Lejos de la figura clásica del rematador, bajó repetidamente hasta la medular para pedir el balón y cayó a banda cuando la jugada lo precisaba. Además, no dudó en mirar a puerta cuando recibió la pelota. Destacó, sobre todo, un buen disparo desde 25 metros que Giorgadilles, meta chipriota, despejó a córner.

A Micael, por su parte, se le intuyó una fuerte vocación ofensiva. Aunque, eso sí, recibió una tarjeta amarilla en el 35 tras cortar con falta una ocasión de gol local. Por otro lado, en el minuto 52 pudo haber penalti sobre él. El árbitro decidió no señalar la máxima infracción. Curiosamente, en la misma jugada, Postiga había sido derribado dentro del área un instante antes, aunque su lance pareció más liviano. Desde segunda línea, trazó buenos desmarques hacia la portería rival. Sin embargo, un Cristiano demasiado ensimismado en su juego no lo vio en dos ocasiones. Finalmente, en el 72, dejó su lugar a Veloso.