Andrea Blas vibra desde la grada con el primer partido del Escuela de Waterpolo Zaragoza

Una lesión en el hombro todavía la mantiene alejada de la alta competición.



No pudo estar en el agua pero no falló en la grada. El primer partido de la temporada de la Escuela de Waterpolo Zaragoza, Andrea Blas lo vivió de forma diferente, obligada por la lesión en el hombro que todavía le mantiene alejada de la competición.


La punta de lanza del equipo zaragozano espera poder volver a jugar en noviembre. Y la boya internacional ya tiene ganas de hacerlo después de otro verano para enmarcar en el que se colgó el oro en el Europeo de Budapest.


Pese a haber tenido ofertas de varios equipos nacionales y del extranjero, Andrea Blas sigue apostado por la Escuela. Una temporada más, y ya son 16, tiene claro su objetivo.