Teresa Perales: "Nunca me planteé estar en una silla de ruedas ni ser nadadora"
La aragonesa ha compartido sus impresiones con jóvenes de diferentes puntos de España en Gerona.
Jóvenes de varios rincones de España han compartido este jueves impresiones con la nadadora paralímpica Teresa Perales en el marco del Fórum Impulsa que organiza la Fundación Príncipe de Gerona, encuentro en el que ésta les ha transmitido que la silla de ruedas nunca ha determinado quién es.
En un ambiente de distensión y humor en un céntrico bar de Gerona, Perales ha lanzado un mensaje de superación, ilusión y esfuerzo al recordar que, pese a que lleva desde los 19 años en una silla de ruedas, tiene el mayor regalo de todos: la vida.
"Nunca me planteé estar en una silla de ruedas como tampoco me planteé ser nadadora", ha comenzado Perales, quien se ha declarado "muy fan" de las personas y del talento con el que, asegura, todos contamos.
"La silla nunca ha determinado quién soy", ha sentenciado la atleta en un repaso de su trayectoria, tras subrayar que si en la vida dejas que los obstáculos te bloqueen, "no puedes hacer nada".
Perales ha criticado que, a veces, se contamine "mucho con información negativa" y ha añadido que "la crisis no tiene la culpa de todo", con lo que ha culminado su elogio de la capacidad de sacrificio.
En esta línea, ha reivindicado una forma diferente de enfocar los problemas consistente en aprovechar situaciones de adversidad como la actual. "Para transformar el mundo hay que centrarse en los pequeños gestos", ha concluido Perales en un elogio de la capacidad de compromiso como forma de alcanzar los objetivos personales.
La nadadora paralímpica ha recalcado que hay que saber gestionar las emociones para mantener el equilibrio durante el camino hacia el éxito, conciliando la actitud con el cuerpo y la mente.
"Nunca pensé que aprendería a nadar ni que podría hablar en público", ha asegurado una Perales sonriente antes de ironizar con el hecho de que, en la actualidad, su vida profesional consista en esto último.
Además, ha invitado a los ocho jóvenes, que no han dejado de prestarle atención durante los cerca de 60 minutos que ha durado su intervención, a no pensar "jamás" en límites, porque "no existen".
