Ferrer y Djokovic se medirán el sábado en semifinales

El serbio Novak Djokovic y el español David Ferrer se medirán el sábado por un puesto en la final del Abierto de Estados Unidos después de superar unos duelos muy físicos, apretados y de gran nivel tenístico.

Número dos del mundo y defensor del título en Nueva York, Djokovic batió por 6-2, 7-6 (7-3) y 6-4 al argentino Juan Martín del Potro en tres horas de partido que emocionaron a los más de 22.000 asistentes a la cancha Arthur Ashe.

Horas antes y en el mismo escenario, Ferrer derrotó al serbio Janko Tipsarevic por 6-3, 6-7 (5-7), 2-6, 6-3 y 7-6 (7-4). La otra semifinal la disputarán el británico Andy Murray ante el checo Tomas Berdych.

Djokovic - Del Potro

Djokovic y Del Potro no dejaron de levantar a los aficionados de sus asientos: peloteos largos desde el fondo de la cancha, bolas a la línea, ojos de halcón que se decidían por milímetros, drops y remates encima de la red.

"Fue una victoria en tres sets, pero estuvo más parejo que lo que dice el marcador. Realizamos puntos y 'rallies' increíbles, espero que todos disfrutaran", dijo el serbio, campeón de cinco Grand Slam, después un encuentro de alto voltaje en la pista central de Flushing Meadows.

El argentino y el serbio dieron un homenaje a los asistentes con un final del segundo set para el recuerdo en el que protagonizaron un juego de 17 minutos.

"Ahí tuve varias pelotas de set, pero Del Potro es un jugador de gran calidad. Intenté mantener la calma y estar cerca de la línea de fondo porque es un jugador muy alto y que golpea muy fuerte", explicó Djokovic antes de ponerse a bailar al ritmo de 'Call me maybe' en una húmeda noche neoyorquina.

Ambos arriesgaron, pero fue Djokovic el que estuvo más certero. El serbio, que conectó hasta 44 golpes ganadores, continúa con paso firme su defensa del trono neoyorquino y alcanzó las semifinales sin ceder un set.

Del Potro, campeón del US Open en 2009, lamentó no haber aprovechado las oportunidades que tuvo en el segundo parcial: "Necesitas suerte en partidos así", dijo el número argentino minutos después de caer. "Estos jugadores no te dan muchas chances y si no las aprovechás estás acabado".

Djokovic acertó siempre que pidió la revisión del ojo de halcón y terminó por desconcentrar a Del Potro, que no se terminaba de creer cada vez que miraba a las pantallas de la Arthur Ashe: "Tenía ganas de romper el aparato ese. Estos tipos juegan a la línea", dijo el argentino, que aseguró que la clave estuvo al final del segundo set.

Ferrer - Tipsarevic

Con algo menos de espectáculo pero con más emoción incluso se decidió el encuentro entre Ferrer y Tipsarevic.

"No tengo palabras para describir lo feliz que estoy", dijo Ferrer tras batallar cuatro horas y 31 minutos.

"Corrí mucho, siempre intento luchar mucho, estar centrado en cada punto. Fue una lotería el último set", agregó extasiado el español, que alcanzó por cuarta vez las semifinales de un Grand Slam.

Ferrer se impuso al noveno del ranking mundial en un encuentro con duros peloteos y buen tenis desde el fondo de la pista.

Ganador de cinco títulos en tres superficies distintas esta temporada, Ferrer está en el momento más dulce de su carrera. Sólo el número uno del mundo, Roger Federer, acumula más trofeos que él esta temporada.

El sábado tendrá delante a Djokovic, el número dos del mundo y máximo favorito después de la derrota de Federer. Y el serbio tiene claro lo que le espera después de lo visto hoy en Nueva York: "Otra batalla", dijo tras despedir a Del Potro.