CAI ZARAGOZA

Los territorios de Miso

Andrés Miso adquiere protagonismo. Hace una semana, contaba cómo se gana en el Palau; el domingo que viene se encara con su ex equipo, el Cajasol; y a continuación, la cita es con otro ex, el Fuenlabrada.

Andrés Miso protege el balón en un ataque del CAI.
Los territorios de Miso
P. ETURA/A PHOTO AGENCY

La ruleta profesional y el calendario deportivo entregan algunas veces galones de protagonista a determinados jugadores. Hace una semana, los focos se volvían a Andrés Miso, uno de los jugadores del CAI que había sido capaz de ganar en el Palau Blaugrana, un escenario infranqueable, hasta el pasado domingo, para el conjunto aragonés. El otro era Darren Phillip. Miso se explicaba: "En diez temporadas que llevo en la ACB me ha dado para ganar unas pocas veces y para perder en otras ocasiones". "Hay que mentalizarse de que hay que intentar estar cerca de ellos durante los 40 minutos. Y que no ocurran esos momentos de lucidez que tienen de meter tres triples seguidos".


Argumentos que ayudaron a que el CAI firmara el brillante asalto al pabellón del Barça, ese mismo escenario en donde apenas unas semanas antes habían caído los Lakers de Gasol, campeones de la NBA. Aquel triunfo lo valoraba después José Luis Abós, satisfecho "por la labor del equipo, por el impresionante trabajo colectivo tanto en defensa como en ataque. Y sobre todo por la fe de los jugadores en que se podía ganar. Muchas veces estos partidos se pierden por no creer que se pueden ganar y este equipo ha creído. Han realizado un trabajo extraordinario y hay que darles la enhorabuena".


"Es que esa victoria da mucho que pensar: ahí van a ganar uno o dos equipos como mucho -indica reposadamente Andrés Miso- . Es un pabellón en el que acaban de perder los Lakers. Y les hemos jugado de tú a tú hasta forzar la prórroga; y hemos mantenido el tipo después hasta ganar con la fortuna de cara en el último tiro".


Ahora, Miso vuelve a tomar dimensión. Y, seguramente, a abanderar esa fe que pide Abós. El domingo, el conjunto aragonés recibe en el pabellón Príncipe Felipe el Cajasol sevillano, el conjunto de procedencia del escolta. En Sevilla, el ahora jugador del CAI adquirió vitola de capitán, aunque abandonó la formación sin que su equipo lo incluyera entre los jugadores sujetos a derecho de tanteo: "Todos los partidos ante un ex equipo son especiales -dice Miso-; y este, aún más, después de lo que ocurrió en verano, cuando no me hicieron una oferta para seguir después de tres años".


Este fin de semana será la primera vez que se enfrente al cuadro de Joan Plaza. Lo hará en casa, arropado por un público que quiere cambiarle la cara al pabellón. Porque el Príncipe Felipe no ha sido, en el inicio de esta Liga, el clásico escenario repleto en apoyo del CAI Zaragoza: "Espero que la victoria del otro día ante el Barcelona -dice el escolta- sirva para animar a la gente, que le ayude a engancharse y puede verse un gran ambiente en este partido".


Duelo al que Andrés Miso da un relieve singular: "Hay que ganar. No podemos perder en casa lo que tanto nos ha costado lograr fuera. Hay que bajar a la tierra y, después de disfrutar de una victoria tan importante, centrarnos ya en el próximo partido".


Es natural, además, que para Miso el partido adquiera una dimensión singular, un perfil distinto. Más aún cuando se da la circunstancia de que los dos equipos llegan igualados, con un 2-2, tras la derrota de los de Plaza ante el Unicaja. Sería el momento de confirmar el buen estado de forma del conjunto aragonés: "La plantilla está muy motivada y con enormes ganas de mantener esta buena línea de juego".


Cajasol está ahí, a la vuelta de la esquina, pero traspasada la línea del duelo con el cuadro sevillano, Miso vuelve tomar papel principal en el guión deportivo del CAI. De cara, el Fuenlabrada, el siguiente rival en la Liga: "Es un equipo al que le tengo un enorme cariño, donde realicé, de largo, mi mejor temporada en ACB. Teníamos un equipo para intentar la permanencia y luchamos por entrar en la Copa y en el play-off".


En la ciudad madrileña adquirió ese dorsal 31 que pasea por las canchas de España: "No estaban libres los que me gustaban y lo elegí para cambiar de aires".


Aunque, el obstáculo, de momento, es el Cajasol del técnico Joan Plaza. Miso no concede nada: "Tenemos que ganar".