El español Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1) aprovechó la ligera mejoría del tiempo en el circuito de Estoril, que comenzó a secarse en algunos puntos del trazado, para marcar el mejor tiempo de la primera jornada de entrenamientos libres para el Gran Premio de Portugal de Moto GP.

Mientras que por la mañana prácticamente ningún piloto salió a rodar, en la jornada vespertina de pruebas la lluvia cesó en su empeño y por algunos minutos dejó de caer sobre el asfalto lusitano, con lo que éste fue secándose y permitió a los pilotos de Moto GP mejorar sus registros con cierta facilidad.

Lorenzo acabó protagonizando el mejor tiempo de la categoría en su penúltimo giro con un registro de 1:48.52, todavía muy lejos del que el ya campeón del mundo de Moto GP de 2010 tiene acreditado en esta pista como el más rápido desde 2008 con 1:35.715.

Aunque hubo mucho baile de nombre al frente de la tabla de tiempos, lo cierto es que en los minutos finales la situación acabó convirtiéndose en la habitual de la categoría, con la sola exclusión del español Dani Pedrosa (Honda RC 212 V), a quien todavía le causa no pocos problemas su lesión en una clavícula.

Así, al mejor tiempo de Jorge Lorenzo en esta ocasión le siguió una buena actuación del estadounidense Nicky Hayden (Ducati Desmosedici), que fue segundo, justo por delante de Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1), quien por momentos llegó a detentar el mejor tiempo de la cilindrada, si bien al final se tuvo que conformar con la tercera plaza.

El australiano Casey Stoner, vencedor de la última carrera disputada hasta el momento, en Australia, ocupó por algunos instantes la cabeza de la clasificación por tiempo, pero no pudo mejorar su registro y acabó relegado a la cuarta plaza a poco más de medio segundo de Lorenzo.

La principal novedad en esta primera jornada de entrenamientos de Moto GP vino de la mano del español Carlos Checa, invitado por la escudería Pramac para sustituir al finlandés Mika Kallio, muy por debajo del rendimiento esperado a lo largo de toda la temporada, y aunque saltó a la pista por la mañana, las malas condiciones del circuito y su escasa adaptación a la Ducati Desmosedici le relegaron a la última plaza de entrenamientos.

En el capítulo de caídas, los pilotos de Moto GP no estuvieron exentos de probar la dureza del asfalto y el español Héctor Barberá (Ducati Desmosedici), que al final fue undécimo en la tabla de tiempos, fue el primero de ellos aunque sin consecuencias para su integridad física, igual que en el caso del italiano Andrea Dovizioso (Honda RC 212 V), el estadounidense Colin Edwards (Yamaha YZR M 1) y el también español Álvaro Bautista (Suzuki GSV RR).