REAL ZARAGOZA

La pastilla de la discordia

Ibercaja y Agapito tensan sus relaciones por causa de este bien. Desde el pasado verano, la entidad financiera busca un posible comprador para el solar donde están las oficinas.

La pastilla de la discordia
La pastilla de la discordia

La recalificación de la pastilla donde se ubican las oficinas del Real Zaragoza, en la calle Eduardo Ibarra, siempre se consideró como una de las vías de solución de los problemas financieros del Real Zaragoza. Por este discurso corría el pensamiento de Alfonso Soláns y por este canal se condujo de igual manera Agapito Iglesias, desde el mismo momento en que adquirió el club. Pero pasados los años, la denominada pastilla de La Romareda sigue siendo un foco de controversias más que una solución. La última disputa es la que se está produciendo entre Ibercaja y el actual presidente y accionista mayoritario del club.


El origen de las diferencias entre la entidad financiera -uno de los principales acreedores del club- y Agapito se encuentra en un préstamo hipotecario que concedió Ibercaja con este bien como garantía. La actual propietaria de la pastilla, la sociedad Real Zaragoza Estate, en cuyo capital social participan el propio Real Zaragoza y la Fundación Real Zaragoza, no está haciendo frente a los plazos de devolución de principal e intereses del mencionado préstamo hipotecario.


Según fuentes consultadas por este periódico, la situación ha provocado dos movimientos por parte de la caja. Por uno, ha procedido a la ejecución de algunos bienes que se constituyeron en aval. Por otro, Ibercaja ha comenzado a buscar un posible comprador para ese suelo, que fue recalificado por acuerdo del Ayuntamiento de Zaragoza. Durante los últimos días, se ha acelerado este proceso.


Agapito Iglesias, que sigue desde la barrera los movimientos de la institución de crédito, solicita en todo caso un "precio justo" por este terreno, situado en una de las zonas más cotizadas de la ciudad, en pleno corazón del barrio de La Romareda. Y es aquí, precisamente, donde surgen las distancias. ¿Qué considera Agapito precio justo? Ibercaja respiraría hondo si pudiera recuperar la parte todavía viva del préstamo, alrededor de 18 millones de euros. El presidente del Zaragoza, sin embargo, no ve clara la operación en esos términos. En su momento solicitó hasta 32 millones. Sobre la mesa tuvo una oferta de 26 que rechazó por estimarla insuficiente.


Entre tanto, la pastilla de las oficinas del Zaragoza sigue siendo un bien litigioso, fruto del recurso que presentó la sociedad Maza Ruba contra el acto administrativo de recalificación de la pastilla.