XAVI HERNÁNDEZ

"A liberarse y disfrutar"

El cerebro de la Roja advierte del peligro del combinado holandés, reconoce ser siempre víctima de los resultados y tiene claro que esta España quedará para la Historia, sea cual sea el resultado de la final del domingo.

Xavi Hernández en una imagen de archivo
"Hay que liberarse y disfrutar"
EFE

¿Cómo se encuentra?


Muy feliz, la verdad, y con muy buenas sensaciones. Esto es lo máximo que puede vivir un futbolista. Quedemos campeones o no, estamos haciendo historia. Ahora hay que liberarse y disfrutar.


Tiene que ser difícil en un momento de tanta tensión.


Hombre, un poco sí. Estos dos últimos días han sido de bastante tranquilidad. Hemos disfrutado mucho con el partidazo de las semifinales y ahora ya pensamos en Holanda, en cómo juegan, en cuáles son sus puntos débiles y sus fuertes... A medida que se acerca la final le das más vueltas a la cabeza y empiezas a sentir las mariposillas en el estómago. Es inevitable pensar en cómo será el partido, en si vamos a ganar, en si vamos a jugar bien... Sólo tienes en mente levantar la Copa.


Para muchos, la verdadera España apareció en la semifinal contra Alemania. ¿Cree que no se ha valorado lo suficiente el trabajo de los partidos anteriores?


La prensa ha sido muy resultadista con este equipo durante el Mundial. Pienso que el primer día hicimos un gran partido. Se perdió ante Suiza porque el fútbol tiene estas cosas. Tuvimos la desgracia de que ellos nos metieron un gol cuando ni lo buscaban y nosotros, en cambio, lo buscamos 20 ó 25 veces y no marcamos. Pero el equipo fue superior, jugó bien al fútbol, con dominio, con posesión, con ritmo. Con alegría. A partir de ahí, se ha sido muy resultadista. El día de Honduras se ganó, el día de Chile se ganó a un equipo que nos hizo un trabajo defensivo espectacular, lo mismo que Paraguay. Los rivales que nos han venido mejor han sido los europeos: Portugal y Alemania. Ellos juegan al fútbol y basculan, y nosotros pudimos hacer nuestro fútbol.


En el Mundial se está demostrando que España se ha convertido en un equipo ganador. Hace unos años, la derrota ante Suiza hubiese supuesto la eliminación.


Puede ser. Para mí la clave es que confíamos mucho en este esquema, en este patrón de juego. Tras el partido contra Suiza, nos reunimos y dijimos: esto hay que sacarlo adelante como sea. Este es nuestro Mundial. Y, de momento, lo está siendo a pesar de haber tenido que jugar a remolque prácticamente todo el torneo. Las sensaciones son inmejorables. Hay un grupo humano fantástico, con talento. Es el momento de nuestra generación y no podemos desaprovecharlo.


Le veo muy convencido.


Es que lo estoy. El primer día nos vino tan mal esa derrota que hasta se generaron dudas en el entorno.


En su caso, se le ha visto más cómodo a medida que pasaban los partidos. ¿Tiene esa sensación?


Yo me he visto muy bien desde el principio, la verdad. Lo que pasa es que yo soy siempre víctima del resultado. Cuando el equipo juega muy bien, como el otro día, me nombran el jugador del partido. También jugaron muy bien Puyol, Iniesta, Pedro o Villa, pero me miran a mí. Y cuando no jugamos tan bien, pues sucede lo mismo.


Es lo que tiene ser el paradigma del fútbol de la selección.


Siempre soy la víctima del resultado. Tras perder contra Suiza, ya salieron las dudas sobre el doble pivote, que si yo no estaba bien, que si jugaba más arriba de mi sitio. ¡Que no! He jugado como siempre. Falló que no entró el baloncito. Ahora, tras ganar, pues soy la víctima de esta España buena y dicen que Xavi ha vuelto otra vez, que ya estoy bien... Así es mi vida.


¿Cómo lleva los elogios?


Bien. Los elogios ayudan. Se vive mucho mejor en el elogio que en la crítica. Oyes hablar bien de ti y te animas. Eso le pasa a todo el mundo. Pero soy muy prudente para estas cosas. Me gusta seguir mi criterio. Me autoanalizo mucho y sé si he jugado bien o si no he estado muy fino y participativo.


Antes de la semifinal, se esperaba una Alemania ambiciosa y un partido de tú a tú. Sin embargo, los alemanes parecieron un equipo menor, algo que es muy propio de esta selección y del Barça.


Nos tenían mucho respeto. Lo de la Eurocopa nos vino muy bien. No es que nos tuvieran miedo, pero sí mucho respeto. Pensaban en nosotros y decían: cuidado, que esta gente sabe jugar bien al fútbol y les tenemos que quitar el balón como sea. Y esa fue su obsesión. Pecaron de eso. No supieron poner su personalidad en el campo. Nosotros, en cambio, sí lo hicimos. Nosotros, nuestro patrón: dame el balón, toca, toca y toca, juega a lo que ves. Pienso que Alemania quiso cambiar su estilo para adaptarse al nuestro y ahí les ganamos.


Llevan tres partidos seguidos con la portería a cero, algo muy meritorio y tranquilizador.


Y tanto. El trabajo defensivo está siendo sensacional. Todo el mundo está enchufado. Fíjate en la presión que hacemos arriba muchas veces. Mira a Pedro, contra Alemania. ¡Ese chico nos dio la vida! Y piensa en el trabajo defensivo de Iniesta. ¡Lahm subió una vez! Villa también presiona y qué te voy a decir de Xabi y Busquets. Y luego atrás hay un nivel tremendo. El mismo Capdevila, que a veces recibe críticas, está haciendo un gran Mundial. Ramos es un portento, 'Puyi' es otro y Piqué es una pasada . Hasta Iker para penaltis, ja, ja.


Quizá un pero. Está faltando puntería y contundencia de cara a gol.


Es verdad. En ocasiones pecamos de eso. Queremos entrar hasta la línea de fondo. De todas formas, también es nuestro fútbol y, cuando sale, queda muy bonito. Pero sí que es verdad que, a veces, no hay que pensárselo tanto y hay que probar desde fuera, sobre todo porque los equipos se nos meten con la línea defensiva muy atrás.


Hay dos grandes variantes en la selección: o con Torres o sin él. ¿En qué cambia el equipo?


Hay variantes. Está claro. 'El Niño' nos da muchísimo. Nos aporta profundidad. Es un tío que nos va fenomenal. Es nuestro punta. Siempre ha sido nuestra referencia. Y defensivamente nos ayuda. Es un jugadorazo. Aquí hay muchos. Cesc no juega de titular, Silva no está participando mucho. ¡Es que es una barbaridad! Hay un nivel extraordinario. De todas formas, juegue quien juegue, lo importante es no perder nuestro patrón.


Villa sólo ha marcado cuando ha jugado con Torres. Curioso.


Sí. Lo veo como una anécdota. Son cosas del fútbol. El 'Guaje' tiene gol jugando en cualquier sitio.


Acaban de ver a Holanda en vídeo. ¿Cuál es la primera impresión?


Son muy sólidos, muy directos...


Dan bastantes patadas.


Patadas, no. Cortan mucho el juego. Ahí tienen a Van Bommel y a De Jong. Van Bommel es un amigo. Buena gente. Muy competitivo y veterano, un todoterreno. Pienso que la principal característica de Holanda es que son muy directos. No se lo piensan. A Kuyt le llega y va para dentro. Con un pase a Robben, ya te hacen un ataque, y Sneijder le pega desde cualquier lado. Y también Van Persie tiene gol. Son peligrosos.


¿Comparados con Alemania?


Los veo más rápidos de mente. Son más imprevisibles.


¿Cómo puede influir en el juego la tensión máxima de una final de la Copa del Mundo?


Es cierto, pero esa presión también puede influir en ellos. Nosotros tenemos que jugar con la cabeza muy fría y el corazón, caliente. Tenemos que imponer nuestra personalidad sin pensar que es la final, tenemos que jugar y jugar.


Disfrutar.


Sí. Lo decía Cruyff y es verdad.


Por cierto, bonito dilema el que tiene Johan Cruyff en la final.


Le leí ayer unas declaraciones en las que decía que, pase lo que pase, él ya ha ganado. Y tiene razón.


Gane o pierda la final, esta España quedará para la historia.


Sin ninguna duda. Este equipo ha calado. Esto es un negocio, pero también es un espectáculo. La gente se siente identificada con este equipo. España ya es campeona sea cual sea el resultado de la final.