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La mejor defensa de la SD Huesca y de Cuco Ziganda

Los azulgranas y el técnico pueden cerrar la temporada con sus mejores números defensivos en el fútbol profesional.

Andrés Fernández retiene el balón durante el 0-0 del lunes ante el Málaga.
Andrés Fernández retiene el balón durante el 0-0 de Málaga.
Carlos Guerrero/LOF

No habrá servido para volar alto, pero la SD Huesca puede cerrar la temporada con su mejor balance defensivo en el fútbol profesional. Este sábado ante el Eibar en El Alcoraz (21.00, LaLiga SmartBank TV) culminará el año 1 de Cuco Ziganda en el banquillo azulgrana y, a su vez, el navarro aspira a firmar sus mejores números en su ya longeva andadura entre Primera y Segunda División. El equipo oscense ha encajado 35 goles en 41 jornadas y se ha visto de este modo penalizado por su escasa pólvora: solo ha anotado uno más, 36, y esa poca capacidad de desequilibrio le ha llevado a convertirse en el rey del empate con 19 tablas y a anclarse en la zona media-baja por la falta de victorias.

Además, se encuentra a un partido de igualar el récord de porterías a cero que lució el curso anterior Andrés Fernández. Entonces fueron 17 y si se mantiene a raya a los armeros se volverá a conseguir un hito con que engordar las estadísticas personales y de club que acarrearía además un peso especial si es que se trata de la despedida del murciano, cuyo contrato expira el 30 de junio. Enfrente, un rival sin opciones ya de ascenso directo pero que quiere colocarse en una situación privilegiada en la rampa de salida del ‘play off’ y disfrutar del factor campo al menos en la primera eliminatoria, para lo que debería imponerse en El Alcoraz.

Ziganda ha armado en su primer curso un bloque alrededor del trabajo defensivo sobre el que ha sujetado las opciones de permanencia postergada más allá de lo que hizo prever la primera vuelta y penalizados por el último tercio del campeonato. La SD Huesca solo ha recibido más de dos goles en un par de ocasiones, en las derrotas ante Cartagena (2-3) y Real Zaragoza (3-0) y dos en seis partidos. En el resto, uno (17 partidos) o ninguno (16). En su entrevista con HERALDO, Ziganda hablaba de dar “un aire diferente” a los azulgranas el curso que viene en una Segunda en la que “la seguridad y el orden dan bastante”.

Esa seguridad y ese orden en la temporada 2022-23 superan al de la pasada a pesar de que el número de puntos y la clasificación final vayan a resultar muy parejos. Entonces, los oscenses sumaron 54 puntos y concluyeron en la 14 posición con 49 goles a favor y 44 en contra, nueve más de los que se han recibido en esta. Si se supera al Eibar, la SD Huesca de Cuco Ziganda firmará 55 puntos con un potencial y unas expectativas menores. Salvo goleada de los eibarreses, se tiene al alcance de la mano la mejor temporada defensiva en la categoría de plata. Ni en los ascensos de Rubi y Míchel se mejoró este dato, con 40 y 42 en contra respectivamente. Claro que la potencia de fuego entonces fue muy superior.

En el curso 10-11, en el que Andrés Fernández se hizo con el premio Zamora de Segunda División, los azulgranas recibieron 45 tantos, aunque el meta murciano participó en 31 partidos en los que encajó 26 goles. Un promedio de 0,83 goles por compromiso que en la actual temporada ha sido levemente peor, de 0,87 durante un periodo mayor de 41 jornadas, con una titularidad incuestionable y actuaciones que han salvado puntos. Ni Miguel San Román, que en enero rescindió para fichar por la Ponferradina, ni Juan Pérez, firmado desde Osasuna en ese mismo periodo y llamado a ser el portero del futuro, han aportado en esta estadística. Solo en la Copa el primero de ellos fue titular y se retiró lesionado en el descanso.

Cuco Ziganda, por su parte, se encuentra a 90 minutos de sellar su mejor campaña desde el punto de vista defensivo. Ha dirigido seis cursos completos entre Primera y Segunda División antes de su aterrizaje en El Alcoraz, y nunca igualó el balance de este ejercicio a pesar de que en la máxima categoría se disputen cuatro jornadas menos. Con Osasuna en la 06-07 recibió 49 goles y 44 al año siguiente, y con el Athletic de Bilbao otros 49 en la 17-18. Ya en Segunda, fueron 59 con el Bilbao Athletic en la 15-16 y, en Oviedo, 46 tantos en la 20-21 y 41 la pasada temporada, en la que se quedó a un suspiro del ‘play off’ de ascenso.

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