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La SD Huesca hace oficial la cesión de Obeng hasta el final de la temporada
El punta hispano-ghanés llega a préstamo desde el Real Oviedo, ha superado el reconocimiento médico y se incorporará el martes a los entrenamientos.
Samuel Obeng ya es futbolista de la SD Huesca. Cuco Ziganda cuenta al fin con el delantero que pretendía, al que conoce bien de su etapa en el Real Oviedo. El club carbayón y el azulgrana han alcanzado un acuerdo para la cesión del ghanés, de 25 años y también con nacionalidad española. Jugará cedido hasta el final de esta campaña, sin opción de compra, y se asume la parte de la ficha correspondiente a este periodo por el préstamo a una entidad donde termina contrato el 30 de junio de 2024. Este lunes se ha sometido al habitual reconocimiento médico previo a la firma del contrato y el martes se sumará a los entrenamientos.
Se añadirá también a una nómina de delanteros debilitada después de la salida de Kevin Carlos para incorporarse al filial del Betis y sin que ninguno de ellos haya desarrollado un papel destacado en lo que va de campaña. El ariete llega para incrementar el nivel de una línea bajo sospecha a la que Ziganda no ha dado continuidad con Carrillo, Kanté y Escriche y ni mucho menos con Juan Villar, y en la que Juan Carlos Real se ha reconvertido a segundo delantero para erigirse en el atacante más inspirado ante la portería rival del plantel azulgrana.
“Un delantero nos ayudaría, hay mucho jugador arriba pero nos daría más competitividad”, había expresado el director deportivo, Ángel Martín González, la semana pasada durante la presentación del portero Juan Pérez. Y Obeng asume este reto con una carta marcada en la baraja: conoce perfectamente el método de trabajo y la forma de jugar del entrenador navarro y, a su vez, este fue su ‘descubridor’ en el Real Oviedo; al menos, el entrenador que le dio continuidad en el primer equipo y para el que marcó 13 goles en dos temporadas y media. También había reiterado al club carbayón su deseo de recalar en el Huesca.
Así, cabe esperar de Obeng un rendimiento inmediato y necesario, ya desde el partido de este sábado ante el Mirandés en El Alcoraz (16.15, LaLiga SmartBank TV), que ha adquirido el rango de vital, de encrucijada entre la posibilidad de mantenerse en una situación cómoda o de zambullirse de cabeza en los problemas derivados de la pelea por evitar el descenso después de la racha de seis jornadas sin ganar y una única victoria en diez partidos.
Ziganda no encuentra a su ‘nueve’. Más allá del rendimiento de los delanteros de la actual plantilla, no ha repetido punta titular en las cuatro jornadas de lo que va de 2023. Kanté lo fue ante Albacete y Las Palmas, Escriche frente al Cartagena y Carrillo con el Real Oviedo. Ninguno de ellos marcó, los dos únicos goles de lo que va de segunda vuelta los han anotado dos centrales, Jérémy Blasco y Jorge Pulido. Kanté no lo hace desde la jornada cuatro, con siete disparos en total entre los tres palos; Carrillo desde la 13 -tres tiros entre palos-, Escriche marcó su única diana al Eibar en la jornada 18 y ha realizado cuatro intentos entre palos.
El problema trasciende el rendimiento de estos futbolistas y posee una naturaleza estructural. La respuesta que puede dar el nuevo punta de la SD Huesca se refiere sobre todo a la primera cuestión, pero le acompaña la ventaja de hablar y entender con soltura el idioma Ziganda, lo que asegura su rápida integración. También las ganas de aterrizar en El Alcoraz y de dejar atrás por lo que resta de ejercicio un Real Oviedo donde a pesar de insistirse en declaraciones públicas que se contaba con él, como apuntó días atrás su responsable de la parcela deportiva, Roberto Suárez, la pujanza de Borja Bastón y Sergi Enrich más el fichaje invernal de Manu Vallejo y las reciente actuaciones como segundo atacante de Koba Koindredi le habrían relegado a un papel residual en los planes del entrenador Álvaro Cervera.
Y el hispano-ghanés ha participado en 22 partidos con el Real Oviedo esta temporada, aunque solo ocho como titular y únicamente ha completado dos de esos compromisos. Precisamente, el del 0-1 de la SD Huesca en la primera vuelta y una derrota por 2-1 frente al Villarreal B en la que anotó su único tanto, de cabeza, en la jornada 14. Más coincidencias: su último choque con la camiseta azul fue el del pasado 22 de enero en El Alcoraz, donde actuó de inicio y firmó 81 minutos en los que puso a prueba a Andrés Fernández en la mejor ocasión de los carbayones antes del gol de penalti de Koba.
El mapa de calor de aquel choque sitúa al nuevo jugador de la SD Huesca que le pueden definir. Sin mucha presencia en el área a pesar de su envergadura -mide 1,83 metros- y más acostado en la banda izquierda del ataque, rápido en la presión y unas estadísticas que reflejan 15 disparos a puerta en los 808 minutos oficiales que ha acumulado, siete de ellos entre los tres palos. Los mismos que Kanté en un periodo similar, de 766 minutos. Su explosión anotadora, de la mano de Cuco Ziganda, se había producido con los ocho goles de la temporada 2021-22. Le dio tiempo a hacer dos cuando el navarro se hizo cargo del equipo, en febrero de 2020, y tres más en 20-21.
A diferencia del resto de movimientos en el mercado invernal, Obeng no llega en propiedad ni se trata de un movimiento con vistas al futuro, sino que responde más a una necesidad presente que se ha de responder con celeridad. Una pieza acorde con las posibilidades económicas del club en este momento, limitadas. El zoco de delanteros en la categoría de plata ha registrado otros trasvases de puntas de un club a otros, casos de Darío Poveda (del Ibiza al Cartagena) o Juan Carlos Arana (del Villarreal B al Eibar).
