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Carcedo gana peso en la elección del nuevo entrenador de la SD Huesca
El riojano condujo al Ibiza a Segunda División en su estreno como titular de un banquillo y cuenta con una amplia trayectoria como segundo de Unai Emery. Para el director deportivo, Garagarza y Martín González están bien posicionados.
La búsqueda de la SD Huesca en los mercados de directores deportivos y de entrenadores continúa con la intención de poder cerrar ambos puestos lo antes posible, el directivo, a poder ser, esta misma semana, y el técnico, a principios de la siguiente. Se trata de dos movimientos que están muy ligados y que supondrán los primeros pasos relevantes de cara a edificar el próximo proyecto. Para el titular del banquillo se han ido manejando varios nombres dado que desde hace tiempo se sabe que Xisco Muñoz no continuará. Gustó por ejemplo Luis García Plaza, que ha acabado en el Alavés, también Rubén Albés, que no seguirá en el Lugo y maneja varias opciones, y ahora se ha destacado en las negociaciones Juan Carlos Carcedo, figura por el que el interés viene de largo.
Riojano de 48 años, su último destino fue el Ibiza, al que ascendió a Segunda División la temporada pasada, y en el que se mantuvo hasta diciembre cuando fue relevado al final de la primera vuelta por Paco Jémez tras una racha de seis partidos sin perder con el equipo situado a cinco puntos del descenso y un balance global de cinco victorias, diez empates y seis derrotas. Su nombre tendría el beneplácito de los candidatos a director deportivo, pero hasta que esa contratación no se cierre no se quiere dar el paso definitivo con el que será el responsable del primer equipo. De Carcedo se valora que ya conoce la categoría y también su amplio currículo previo como asistente de Unai Emery.
A la vera del actual responsable del Villarreal, con el que durante su etapa como jugador ya había compartido vestuario en el Leganés, pasó 14 años que se iniciaron en el curso 2006-07 en el Almería y siguieron en el Valencia, el Spartak de Moscú, el Sevilla, el PSG y el Arsenal, hasta que en 2020 decidió aventurarse como primer entrenador. Su doctrina futbolística pasa por la intensidad, la presión, el juego dinámico y la disputa de la posesión. Con los baleares su esquema más repetido fue el 4-2-3-1, dibujo que también ha sido habitual en el Huesca con Xisco.
A Ibiza llegó de la mano de Fernando Soriano, quien también ha dejado en este curso el club insular. El zaragozano es uno de los directores deportivos con los que el Huesca ha mantenido contactos tras el cese el lunes de la semana pasada de Rubén García. A este respecto, especialmente bien valorados se encontrarían Fran Garagarza, ex del Eibar, y Ángel Martín González, con pasado en Osasuna, Real Zaragoza, Oviedo y, hasta abril y durante tres años, del Getafe. Con los del sur de Madrid los azulgranas han mantenido una fluida relación en ese tiempo. Solo en la última campaña han llegado desde allí Miquel y Poveda, cedidos, y Timor, tras rescindir su contrato mientras que en el Alfonso Pérez ha jugado a préstamo Sandro.
Buffarini, interés en Argentina
Julio Buffarini, al que le resta una temporada de contrato con el Huesca y que está cedido en el Cartagena, podría regresar a Argentina. El Talleres de Córdoba ha mostrado interés en su repatriación.
