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La SD Huesca, con mucho que decir en el cierre de la temporada
Los tres próximos rivales de los azulgranas están metidos de lleno en la pelea por evitar el descenso y el último se mantiene en la carrera por el ascenso directo.
Ya está salvada y la derrota frente al Leganés del lunes (2-1) cerró la pequeña rendija por la que aún entraba la luz del ‘play off’. La SD Huesca ha llegado a las cuatro últimas jornadas sin objetivos especialmente estimulantes más allá del intentar quedar lo más arriba posible en la tabla por aquello de las recompensas económicas. La situación, para nada deseada al inicio del curso cuando se apuntaba al ascenso, sin embargo resulta envidiable para sus tres próximos rivales. Los avatares del calendario han querido que los azulgranas, sin estar implicados de manera directa en ella, estén en posición de ser un actor determinante en la carrera por evitar el descenso. De forma consecutiva se van a ver las caras con el Sporting, el Amorebieta y la Real Sociedad B, conjuntos que pugnan por seguir en Segunda División.
Tras la disputa de la jornada 38, la clasificación dicta que con doce puntos por entrar en juego el Alcorcón ya es equipo de 1ª RFEF, mientras que el Fuenlabrada está a menos de un paso de seguirle. Por delante, aún en zona de descenso, el Amorebieta y el filial donostiarra ven la salvación a cuatro puntos, línea que marcan el Málaga y el Sporting.
Los andaluces y los asturianos mantenía cierta distancia de seguridad respecto a la zona roja, pero sus derrotas el pasado fin de semana unidas a los triunfos de los dos conjuntos vascos les han puesto en apuros hasta el punto de que el Sporting llegará el sábado a El Alcoraz (16.00) con nuevo inquilino en el banquillo. Tras el su último 0-1 con el Ibiza, los rojiblancos decidieron el martes prescindir de Martí, que ya había relevado a David Gallego, pero que en diez jornadas solo había conseguido un triunfo, y entregarle las riendas a un ex, Abelardo, con el que celebraron un ascenso en la 2014-15. El nuevo entrenador deberá levantar la moral de un grupo que arrancó con fuerza la liga y que llegó a ocupar el liderato, pero que se ha ido cayendo con el paso de las semanas. En la segunda vuelta solo ha podido festejar tres victorias.
Más con el viento a favor se encuentran el Amorebieta y la Real B. Al primero, el Huesca lo visitará el sábado de la semana que viene a las 14.00 en Lezama, donde actúa como local. Allí el conjunto que dirige Aritz Mújika desde hace ocho jornadas se ha impuesto en sus tres últimos choques tumbando al Ibiza (3-1), al Mirandés (1-0) y al Fuenlabrada (2-1). Antes de medirse a los azulgranas habrán sido recibidos por el Almería, segundo en la tabla.
Lo mismo le ocurrirá a los cachorros de la Real, su choque previo al que será el último duelo en El Alcoraz del curso será frente a los indálicos tras haberse encontrado esta semana con el Fuenlabrada. Los donostiarras se han levantando con dos marcadores favorables seguidos ante el Amorebieta (2-1) y el Valladolid (1-2).
Valladolid, última parada
El marcador del José Zorrilla fue toda una sorpresa que además ha hecho que los pucelanos hayan dado un paso atrás en la pelea por el ascenso directo. El bloque de Pacheta será contra el que el Huesca eche el cierre al curso a domicilio. Ahora mismo es tercero y tiene al Almería a cuatro puntos y al Eibar, a cinco. Ambos se enfrentan el domingo en un Ipurua que estará lleno. Su objetivo, seguir manteniendo opciones cuando tengan que recibir a un juez cuya toga es azulgrana.
