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La SD Huesca naufraga en su visita al Alcorcón
Los azulgranas cayeron por 1-0 frente a un colista que llevaba 21 jornadas sin ganar en un partido para el olvido que apaga las opciones de ‘play off’ y deja tocado al equipo y a su técnico, Xisco Muñoz.
Dentro de una temporada en la que sus buenos partidos tampoco es que abunden, encontrar uno peor que el que protagonizó en Alcorcón resulta complicado. La SD Huesca cayó por 1-0 frente al colista, un conjunto que tiene más que complicado, por no decir imposible, salvarse y que sumaba 21 jornadas sin ganar; una vuelta entera. El resultado y el pobre juego exhibido confirman de forma más que clara la deriva negativa que comenzó a apuntarse en la derrota con el Ibiza (2-1) y que se manifestó en el 0-0 con Las Palmas. El definitivo gol de Borja Valle en el 71’ echó una palada de tierra sobre las opciones de entrar en el ‘play off’, meta que a falta de once jornadas queda a once puntos, y que, con el descenso a ocho, deja a los azulgranas atrapados en la zona intermedia con un largo camino por andar que no se sabe hacia dónde conduce.
Había hablado Xisco en la previa que el equipo debía "disfrutar" y "liberarse". Lejos de eso, se mostró atenazado y lleno de dudas. Ni el fútbol, ni los resultados avalan en estos momentos al técnico y a sus futbolistas. Más que una cuestión de tácticas, jugadas o estudio del rival, parte importante del trabajo que hay que hacer para que el final del curso sea lo más positivo posible pasa por el aspecto psicológico.
No se puede decir que el entrenador no intentase un giro de guion, pero ni mucho menos le salió bien. Después de que durante toda la segunda vuelta hubiese apostado por un sistema con tres centrales, en Santo Domingo decidió cambiar de dibujo. Probó en el primer acto con un 4-4-2, pero el resultado distó mucho de ser satisfactorio hasta el punto de que en el descanso decidió realizar tres cambios de una tacada para recolocar a los suyos en un 4-3-3. De inicio, las novedades fueron las de Ratiu, Florian Miguel y Joaquín, y quedaron en el banquillo Pulido, Pablo Martínez y Mateu, que acabarían entrando en el terreno de juego. El primero, antes de la primera media hora por la lesión de Miquel y los segundos, en la revolución para el segundo acto cuando les acompañó también Mosquera marchando Escriche, Joaquín y Timor. La falta de pólvora en los locales evitó un marcador más abultado. Arriba, los oscenses solo tiraron una vez entre los tres palos.
El Huesca fue un equipo partido, que pudo hacer daño a la contra, pero que no trenzó y que cada vez que perdió en campo contrario sufrió para regresar hacia el suyo. Hubo imprecisiones en los pases, indecisiones y falta de coordinación.
Nada más arrancar ya hubo una acción de las que erizan los pelos y que vaticinó el duelo de difícil digestión que vendría después. Borja Valle se coló hasta la línea de fondo, pasó hacia atrás a Calero y el disparo golpeó en Ignasi Miquel. ElVAR revisó un posible penalti, pero el central tenía el brazo pegado al cuerpo.
Los equipos han aprendido bien cómo crear problemas al Huesca y el Alcorcón, que en sus últimas actuaciones se lo había puesto muy difícil a sus contrincantes, no fue una excepción. Solo en el primer periodo realizó quince centros laterales. Muchos de ellos en acciones a balón parado en las que Andrés estuvo atento.
Los madrileños, no obstante, fallaron en el último momento. Buen ejemplo de ello fue el traspié de Mula. Escriche cometió un error en la salida del balón, la pelota le llegó al ‘7’ del Alcorcón y a éste se le enredaron las botas a la hora de golpear. Después también tuvo una buena ocasión que Andrés desbarató tras un resbalón de Ratiu.
La oportunidad más clara del acto inicial pudo ser oscense. Después de que Valentín hubiese desaprovechado un tiro cruzado en un ataque conducido por la derecha, Escriche tuvo un mano a mano en el que tardó en decidir qué hacer. El de Burriana se lanzó solo a por la puerta de Jesús Ruiz, pero estuvo lento. Los defensas se le fueron echando encima, no tuvo claro si fusilar o ceder a Poveda, que corría a su vera, y cuando optó por ello, fue demasiado tarde. Ignasi Miquel, que ya la semana pasada se había retirado antes del 90’ por problemas musculares, pero que en los días posteriores había trabajado con normalidad, tuvo que dejar su sitio a Pulido tendiéndose en el césped.
La segunda parte, ya con las novedades de Mateu, Pablo Martínez y Mosquera, se abrió con una nueva revisión del VAR en un contacto entre Floran Miguel y Rivas. El Huesca adelantó su línea de presión, encerró algo más al Alcorcón, pero el buen juego siguió sin llegar. En una galopada Apeh pudo haber hecho daño, pero Insua se cruzó a tiempo.
Seoane se llevó en la banda derecha el balón entre tres de amarillo, cedió a Pablo Martínez y éste a Mateu que mandó el esférico cerca de la cepa. En la respuesta, Víctor García centró y desde atrás apareció Borja Valle para cabecear el 1-0 a 19 minutos para el final.
El Huesca intentó reaccionar. Seoane, desde el vértice del área, consiguió el único tiro oscense a puerta, pero fue a las manos del meta local. Xisco agotó los cambios retirando a Florian Miguel para hacer sitio a Gaich en el 75’. Tras un fallo de Pulido, Víctor García tuvo el 2-0, resultado que en el tramo final estuvo más cerca que el 1-1. Los visitantes se fueron hacia arriba, pero el intento de arreón no condujo a nada y el naufragio se acabó consumando. La próxima parada será el viernes en El Alcoraz con el Burgos.
Ficha técnica
AD Alcorcón: Jesús Ruiz, García, Rivas, David Fernández, Iván Calero, Mula (Hugo Fraile, 85), José Ángel, Borja Valle (Xisco, 85), Olabe (Carlos Hernández, 85), David Forniés (Valencia, 63) y Apeh (Zarfino, 76).
SD Huesca: Andrés, Ratiu, Insua, Miquel (Pulido, 26), Florian Miguel (Gaich, 75), Valentín, Timor (Pablo Martínez, 46), Seoane, Joaquín (Mosquera, 46), Escriche (Mateu, 46) y Poveda.
Goles: 1-0, min. 71: Borja Valle.
Árbitro: González Francés (Comité de Las Palmas). Mostró tarjeta amarilla a los locales José Ángel (42) y a los visitantes Timor (31), Pulido (40), Insua (61).
Incidencias: Partido correspondiente a la 31ª jornada de liga de Segunda División disputado en el estadio de Santo Domingo ante 3.000 espectadores.
