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Xisco Muñoz: "Quiero ver sangre en los ojos por ganar el partido"
El técnico de la SD Huesca apela a la ambición de los suyos de cara a la visita del Mirandés, un partido que espera que sirva de punto de inflexión y en el que quiere que su equipo pase a ser el protagonista del juego.
Por encima de lo táctico, de los nombres propios o de las características del rival, Xisco Muñoz ofreció este sábado una rueda de prensa previa al partido entre la SD Huesca y el Mirandés del domingo (18.15) en la que primó el componente motivacional. Para encarar los próximos compromisos y avanzar en la clasificación, tras los últimos sinsabores el técnico pidió más tanto a los jugadores y lo miembros del cuerpo técnico como así mismo y anunció que el cambio de paradigma que ha venido apuntando en los últimos encuentros debe ser a partir de ya la constante. “Quiero ver sangre en los ojos por ganar el partido”, describió gráficamente la idea de que “no debemos esperar a que las situaciones ocurran, sino generarlas para ganar”. “Hay que hacer que las cosas pasen”, recalcó. Su intención es lograr un triunfo que haga “clic en el equipo” e impulse la ansiada buena racha que permita acercarse al ‘play off’, distante ahora a nueve puntos, y “darle la vuelta a la situación”.
El entrenador balear entiende que dentro del proceso iniciado cuando tomó las riendas ha conseguido que los azulgranas sean “sólidos en bloque bajo y medio”. Por ello, ahora “toca serlo en campo contrario”. “Es algo difícil de lograr en solo tres meses y con competición de por medio, pero lo estamos consiguiendo”. A este respecto, esgrimió estadísticas que indican que “somos el tercer equipo que más finalizamos entre los tres palos”.
El cruce con el Mirandés lo calificó de “especial”. “Volvemos a casa y tenemos otra oportunidad de dar un paso adelante”, afirmó. “Tenemos que ser valientes e ir al campo contrario, hemos pasado la etapa de estar más protegidos”, anunció la actitud que espera de los oscenses en El Alcoraz. “Es el momento de ser valientes y no regalar minutos, estamos capacitados para ir a una velocidad alta desde los primeros minutos”, añadió. Enfrente se encontrarán con un rival “dinámico, que interpreta bien los espacios y que tiene buena pegada, pero al que le penaliza el hecho de que recibe bastantes goles”.
En casa, el Huesca lleva perdidos 25 puntos en lo que va de temporada. De ellos, los últimos tres volaron en el último segundo ante la Ponferradina (1-2). “Me fui molesto de los encuentros con el Ibiza y el Alcorcón, del de la Ponferradina, no”, contrapuso dos empates a cero al tropiezo con los del Bierzo. “Si pedimos valentía, la moneda puede caer del otro lado”, expuso sobre lo ocurrido en su última actuación en casa, cuando los suyos fueron a por la victoria tras lograr el empate, pero perdieron.
Cuestionado sobre cómo se encuentra el vestuario comentó que “nadie puede estar contento del rendimiento de uno mismo, yo el primero”. “Tenemos que ser autocríticos, no damos lo que se nos pide”, reconoció calificando sus números de victorias, tres en trece jornadas, de “ruina”. Lo que no quita para que tenga “muchas ganas de que el domingo nosotros hagamos que cambie la situación”.
Para conseguir que el Huesca sea más protagonista en el juego, los jugadores, a los que pidió mayor determinación y “exponerse”, “deben sentirse fuertes”. Para ello, también será importantes los cinco refuerzos llegados en el mercado de invierno, “ahora tenemos más jugadores y registros”. De todos modos, “no tenemos que cargar toda la responsabilidad a los nuevos, si queremos que esto vaya bien también la tenemos, los capitanes, el grupo y el cuerpo técnico”.
Como en otras intervenciones respaldó y alabó el trabajo del club a la hora de incorporar refuerzos, además de descartar que vayan a llegar más desde la bolsa de jugadores en paro. “Ahora mismo tenemos el umbral de exigencia mucho más alto”, aseguró.
Su postura acerca de Kelechi Nwakali, cuyo futuro en el club está pendiente de clarificarse y que, después del retraso en su incorporación tras su participación en la Copa de África, aún no ha vuelto a trabajar con sus compañeros, es similar a la ya expresada en los últimos días por el capitán Jorge Pulido o por el director deportivo Rubén García. “Un jugador siempre es bienvenido y Nwakali más, pero con compromiso, ganas y ambición”. “Necesito gente comprometida y valiente, que quiera correr el riesgo que debemos correr”, añadió.
