Cuando la experiencia es un grado en la SD Huesca

La vuelta de la SD Huesca a la categoría de plata reclama la adaptación a un ecosistema bien conocido por la mayoría de los futbolistas que en este momento figuran en el proyecto 2021-22. El grueso de jugadores con contrato ya ha experimentado en mayor o menor medida la Segunda División. Los más veteranos superan los 100 e incluso los 200 encuentros y los más jóvenes ya suman un bagaje que aumentar en los próximos meses. El paso por Primera y las cesiones a otros clubes han curtido el perfil necesario para afrontar el reto deseado en la que será la décima temporada del club azulgrana en el segundo escalón del fútbol.

La cantidad acumulada de apariciones en Segunda de los 16 jugadores que ahora mismo vestirían de azul y grana es de 1.345 partidos, si bien el balance es desigual entre unos y otros. En las últimas temporadas, la dirección deportiva ha conseguido equilibrar un plantel con minutos entre Primera y Segunda al que no cogerá de sorpresa la exigencia de una Liga Smartbank en la que ya aguardan conjuntos como Leganés, Almería o los descendidos Valladolid y Eibar. Todo ello, a la espera del añadido de las nuevas incorporaciones; cabe recordar que en los dos ascensos desempeñaron un papel decisivo futbolistas sin experiencia previa en España como Chimy Ávila, Cucho Hernández o Shinji Okazaki.

De todos, el más curtido es David Ferreiro con 257 partidos. El extremo gallego ha disputado casi la mitad, 114, con el Huesca en tres temporadas en la categoría de plata. Un número que da fe de su importancia y experiencia aplicables el curso que viene. A los 33 años todavía atesora fútbol en sus botas y no resulta difícil aventurar que volverá a pedir paso en los onces del próximo curso. Por detrás de Ferreiro aparece Borja García con 241 compromisos en Segunda División. Fichado para el pasado, podrá así foguearse en una liga que conoce bien y en la que ha participado con Rayo Vallecano, Córdoba, Real Madrid Castilla y Girona.

Algo más lejos de los dos, y por encima de las 100 comparecencias en Segunda, se hallan Mikel Rico y Jorge Pulido. El centrocampista vasco, con 144 en total, ha cubierto dos etapas con los azulgranas tras formar parte de la plantilla que ascendió en 2008: 41 partidos en la 09-10 y uno en la siguiente antes de firmar con el Granada. De vuelta en la 19-20 fue el único futbolista a las órdenes de Míchel Sánchez que tomó parte en las 42 jornadas. Pulido ha dejado su sello en 143 encuentros, 78 de ellos de azulgrana y el resto con Real Madrid Castilla y Albacete Balompié.

104 apariciones se le anotan a Javi Galán, y al lateral izquierdo se le presenta un futuro brillante en la élite. Algo semejante se puede afirmar del guardameta Álvaro Fernández, en la agenda de varios clubes y con 53 compromisos en la categoría de plata, 36 de ellos en Huesca. 61 jugó Sandro Ramírez con el filial del FC Barcelona en Segunda División, en un paso que de repetirse devolvería al canario a esta liga siete años después de la última vez.

De entre el resto de jugadores con contrato en vigor nadie alcanza la centena de comparecencias en Segunda. Se acerca Pablo Insua con 81, de los que siete han sido con los aragoneses; Escriche atesora 73, 15 de ellos en el Huesca; el recién fichado Cristian Salvador 71; Joaquín Muñoz (46) dispondrá de la ocasión de brillar en El Alcoraz tras sus cesiones a Mirandés y Málaga. Andrés jugó los 31 de la temporada 10-11, Nwakali atesora 23 y Seoane, 16.