La visita del Barcelona, el "partido especial" de Sergio Gómez

No es el regreso al hogar, eso se producirá en febrero, pero sí la primera vez en la que vea en las camisetas de enfrente el escudo del club en el que se crío futbolísticamente. Para Sergio Gómez, el encuentro del domingo ante el Barcelona (21.00) es "especial". "Pasé ocho años en su cantera y tengo muchas de jugar ese partido y de encontrarme con antiguos compañeros que han llegado al primer equipo", reconoció este viernes tras el primer entrenamiento de 2021.

El centrocampista de veinte años cumple su segunda campaña en la SD Huesca, donde se encuentra cedido por el Borussia de Dortmund que hace ahora prácticamente dos años lo incorporó a sus filas pagando su cláusula de rescisión, tres millones de euros. El badalones, entonces en edad juvenil, ni siquiera había debutado aún en la élite y tan solo sumaba dos participaciones con el filial blaugrana en Segunda División. El ser elegido balón de plata en el Mundial sub-17 en 2017 lo había elevado a la categoría de promesa de primer nivel y los alemanes le pusieron sobre la mesa un proyecto deportivo que le daba la posibilidad de jugar en la Bundesliga, lo sopesó y, ante la falta de opciones en el Camp Nou, aceptó. El que había sido el balón de oro, Phil Foden, ya estaba teniendo minutos en la Premier League con el Manchester City, y antes que él también habían volado de La Masia otros talentos como Eric García y Jordi Mboula, también en el Huesca la temporada pasada.

Tras apenas jugar en Alemania recaló en El Alcoraz siendo pieza habitual para Míchel durante el ascenso con 36 partidos jugados. En la actual, ya compitiendo entre los mejores, sus participaciones están siendo más esporádicas, 201 minutos repartidos en diez jornadas. Tras jugar de inicio en la visita al Real Madrid (4-1), prácticamente había desparecido de las escena hasta que en los últimos dos careos ha vuelto a tener protagonismo desde el banquillo. En el 1-1 con el Levante gozó de 22 minutos y en el 2-1 en Vigo de 24. Contra el Celta, de hecho, asistió a Seoane en el tanto visitante y también estuvo cerca de marcar. "Tenía muchas ganas de tener minutos, fue bastante bien y espero jugar más contra el Barcelona", comentó.

El centrocampista, que aguarda la presencia de Messi, ve a su equipo "muy motivado". "Tenemos que seguir con las mismas ganas e ilusión", aseguró. Del Barcelona considera que "puede sorprender por cualquier lado" y por eso cree que el Huesca debe "reforzar lo que hacemos bien". "Los resultados no llegan, pero nos dejamos todo en el campo", afirmó.

Además de Sergio Gómez, también pasaron por la cantera del Barcelona Rafa Mir y Sandro Ramírez, que llegó a pertenecer al primer equipo. El concurso del canario en el partido está a expensas del entrenamiento que el Huesca debe desarrollar el sábado. En el de este viernes se mantuvo al margen al igual que Pablo Maffeo, que por segundo día consecutivo pisó césped y que sigue con la recuperación de su rotura de fibras.