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Míchel quiere salir del descenso “cuanto antes” para que se deje de ver el vaso medio vacío

El técnico de la SD Huesca considera que sus jugadores están en un buen momento de cara a la visita del Levante, un partido en el que tendrán que ser “agresivos”.

Míchel Sánchez, durante el entrenamiento de este lunes previo a la visita del Levante.
Míchel Sánchez, durante el entrenamiento de este lunes previo a la visita del Levante.
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Míchel Sánchez ve a sus jugadores preparados, con buena disposición y atravesando por un momento dulce en cuanto juego que espera ver reflejado en los resultados de forma inmediata, en la visita del Levante del martes a las 19.45. Un triunfo haría que la SD Huesca alcanzase a los granotas en la clasificación y le permitiría abandonar los puestos de descenso, en los que lleva metida ocho jornadas. “Hay que salir de ahí cuanto antes”, expuso el técnico. “Ya en Bilbao sabíamos que existía esa opción, la volvemos a tener y la queremos”, manifestó. “Cuando empezó la Liga no entramos en ellos en las primeras jornadas, teníamos la sensación de que si seguíamos así no nos meteríamos, pero lo hicimos, por esos tenemos que volver a salir”, comentó dejando claro el objetivo del choque.

A este respecto, el entrenador continúa manteniendo las cuentas que viene manejando desde semanas atrás y que fijan que de cara al final de año los altoaragoneses deberían tener un mínimo de quince puntos. Ahora mismo suman once y tienen por delante dos jornadas por lo que "al menos hay que ganar en una y empatar otra". "Si ganamos los dos partidos estaremos muy cerca de donde queremos y si no ganamos ninguno, muy lejos", describió. Echando la vista más adelante, al final de la primera vuelta, dentro de cinco encuentros, quiere llegar "cerca de los veinte puntos".

Los números podrían haber sido más benignos si en tres de los cuatro últimos duelos no se hubiesen escapado puntos al final. Sucedió en el 2-0 del viernes ante el Athletic, en el 3-3 en Granada y en el 0-1 del recibimiento al Sevilla. De entre esos compromisos, solo al de los nazaríes, en el que tras ir 1-3 encajaron dos goles seguidos en el desenlace, lo achaca a un fallo de mentalidad o “a la psicosis de lo minutos finales”. De todos modos, sí que alertó de que “tenemos que ser mentalmente fuertes y concentrarnos en cada acción”. “Los partidos duran 95 minutos y si somos competitivos durante 87, tenemos que seguir siéndolo hasta que pite el árbitro; entonces nos preocuparemos o alegraremos”, indicó.

Centrándose en el Levante, Míchel calificó la cita de “importantísima” porque “nos permitiría meternos de lleno en la pelea”. “Es un partido en el que hay que ser mas que nunca nosotros mismos y muy agresivos tanto con el balón como sin él”, avanzó. A su juicio, el choque con los valencianos, que se presentarán tras ganar a la Real por 2-1, “irá por quién es el equipo que maneja mejor la posesión”. “Hay que quitarles la soltura que tienen con el balón, que se sientan incómodos y cerrarles los espacios”, anunció las líneas maestras de su plan.

Míchel también realizó una valoración sobre cómo ha venido evolucionando el Huesca. “En los cinco primeros partidos tuvimos sensaciones muy buenas, luego pasamos una racha en la que no estaba del todo contento, y a partir de Granada veo al equipo otra vez bien”, resumió. “El equipo está en un muy buen momento, vamos a competir bien y conseguir una victoria para estar cerca de muchos que nos de otra perspectiva diferente a la del vaso medio vacío”, anunció.

Para el duelo confirmó las ausencias de los lesionados Valera y Maffeo, y del sancionado Pulido. De las dos dudas que existían, Borja García y Sandro, solo el primero estará disponible. El delantero, que arrastra una dolencia muscular, se probó en el entrenamiento de este lunes, pero aún no está listo. Además, no escondió que el compañero de Siovas en el centro de la defensa será Insua. 

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