Día de estreno goleador para Mikel Rico, Borja García y Okazaki

No sirvieron para ganar en Granada, pero por primera vez en toda la temporada la SD Huesca marcó tres goles en un partido, lo hizo además a través de jugadores que todavía no habían conseguido superar al portero, Mikel Rico, Borja García y Okazaki. El vasco abrió la cuenta, el madrileño cantó el 1-2 tras el descanso y el japonés festejó la tercera diana visitante, la que todo hacía indicar que sería la de un triunfo que acabó reducido a un empate a tres

A diferencia de en otras ocasiones en las que habían actuado más pegados a Mosquera, Rico y Borja García jugaron en esta ocasión algo más adelantados, lo que les permitió sumarse al ataque con mayor asiduidad. Por contra, el pivote gallego se vio demasiado solo en algunas acciones.

Los dos goles de los medios nacieron en centros laterales. El de Rico lo sirvió Sandro para que cabecease a media altura llegando desde atrás y en el segundo la asistencia fue de Ferreiro. "El equipo ha entrado bien en la segunda parte y hemos marcado un gol haciendo lo que trabajamos, salida desde atrás y llegada por fuera para encontrar el espacio", comentó Rico sobre la diana de Borja García.

El de Okazaki fue una bonita parábola en la que el nipón aprovechó un mal despeje y el hecho de que el meta del Granada estuviese adelantado. Con ese tanto, el pichichi azulgrana de la temporada pasada ya puede presumir de haber marcado en tres de las principales ligas europeas, la Bundesliga, la Premier League y la Primera División.

La dicha para los tres no pudo ser completa al no sumarse los tres puntos. De hecho, los gestos de los jugadores a la finalización del encuentro fueron los habituales tras una derrota.

"Es un partido que no tiene explicación, el equipo no se ha metido atrás, ha sido ambicioso y ha tenido opciones de marcar más goles. Sin embargo, en un centro lateral y en una falta ha llegado el empate", lamentó Rico, que fue el encargado junto a Galán de ejercer de portavoz de la plantilla. "Hemos sido superiores al Granada y hemos jugado a lo que hemos querido", reforzó su idea de que él y sus compañeros habían hecho todo lo posible para ganar.

Por eso, el sentimiento que quedó en el vestuario fue el de que "hay que tirar para arriba". "Tenemos que corregir los errores, estar todos unidos y trabajar", expuso Galán apuntando al duelo del próximo sábado ante el Alavés en El Alcoraz (18.30).

Tras guardar descanso el lunes, el equipo, que regresó a Huesca tras el duelo en el Nuevo Los Cármenes, comenzará a prepararlo el martes el Pirámide. En principio, todos los jugadores estarán disponibles. "Creemos en lo que hacemos y estamos unidos, vamos a seguir", aseguró Rico.