El Huesca regresa a Primera para quedarse
El club se marca el objetivo de ser más competitivo que el año del debut para tratar de asentarse en la máxima categoría. En un contexto marcado por la incertidumbre derivada de la covid-19, los clubes españoles se aprietan el cinturón.
Será, probablemente, la temporada de desarrollo más impredecible de la historia de la Primera División. La covid-19 marca a partir de este sábado el inicio de un campeonato peculiar desde el primer día: con el estreno de los grandes aplazado por su participación en las competiciones europeas de agosto, sin fútbol ni los viernes ni los lunes y con la amenaza constante del coronavirus. Hasta nueva orden, y como sucedió durante los meses de junio y julio, sin público en los estadios. Empieza, más que nunca, la Liga de la televisión y los transistores. En este contexto regresa la SD Huesca a la élite mundial; esta vez, para quedarse y mostrar el mismo aliento competitivo que le ha brindado dos ascensos en tres campañas.
Otras de las consecuencias de la pandemia está siendo la de un verano poco movido. El mercado avanza con paso de elefante y se cerrará en una fecha inédita, el próximo 5 de octubre. Así, el nivel de las plantillas de Primera se puede igualar ante la falta del empuje económico de años pasados; solo el tiempo dirá si se trata de la mejor tesitura para alcanzar el objetivo de la permanencia que se escapó durante el curso 2018-19 en la primera vuelta y pese al notable rendimiento en la segunda. Los problemas en las dos áreas mermaron el empuje de un equipo con fe infinita y numerosos infortunios.
En pos de este anhelo, el club azulgrana mantiene el bloque del ascenso y el campeonato de Segunda División, hasta el punto de que podría armarse un once con futbolistas del curso pasado. Pero se es consciente de que se necesita incrementar el nivel en todas las líneas y de momento se ha puesto el acento en la defensa con las llegadas del meta Andrés Fernández (Villarreal), el lateral derecho Pablo Maffeo (Stuttgart) y el zaguero uruguayo Gastón Silva, que se encontraba sin equipo, además del recuperado Sergio Gómez desde el Dortmund.
A unos días del reestreno de la SD Huesca en Primera División, se acelera el pulso de un club que, al tiempo, mantiene la mesura en la planificación del nuevo curso. Mientras Míchel Sánchez afina los instrumentos de que dispondrá este domingo en La Cerámica (18.30, Movistar LaLiga) y la dirección deportiva rastrea con detenimiento las mejores opciones, el corazón de los aficionados late con fuerza mientras se asoman a otro año en Segunda División en el que se quiere volver a disfrutar y, además, ser muy competitivos. Este es el deseo que reitera el consejero delegado, Manolo Torres, quien encabezará la expedición azulgrana a los dominios del Submarino Amarillo.
El mandatario lanza un mensaje optimista y se refiere a "la ilusión, el vértigo y las ganas" por que el balón eche a rodar para un equipo que tiene el aval del brillante curso pasado. "Hay confianza en estar en una competición que ya conocemos, queremos disfrutar y sobre todo competir. Tratar de quedarnos cuantos más años mejor y convertirnos en un equipo referente de la categoría dentro de nuestras posibilidades y conscientes de nuestro nivel. Con la máxima exigencia en la competición".
La SD Huesca se pone a punto a todos los niveles. Este jueves salió a la venta una primera remesa de equipaciones en las tiendas físicas y online que aumentará en los días venideros y se espera una respuesta inmediata de los aficionados que, por el momento, no podrán lucir las nuevas camisetas ni en El Alcoraz ni en los desplazamientos. "El fútbol no deja de ser un espectáculo para que lo disfrute la afición. Estamos en un escenario que impide la asistencia a los campos de fútbol y vamos a confiar en que la evolución de la covid-19 permita que más pronto que tarde haya espectadores en los estadios y que nos acompañen en este bonito reto de la Primera División", señaló el consejero delegado.
Sin querer ir más allá de las palabras que ya utilizó el director deportivo, Rubén García, durante la presentación de Pablo Maffeo y Gastón Silva, Torres sostiene que se está preparando un "buen equipo" con "paso firme, prudencia y la audacia necesaria en el mercado que nos estamos encontrando. Vamos a estar ahí partiendo de la consideración de que mantenemos el equipo que nos hizo campeones de Segunda División y que buena parte de los mimbres están en el cesto. Veremos qué podemos incorporar y en eso estamos trabajando".
Se tiene "la máxima ilusión y confianza" en el cuerpo técnico que encabezará por segundo curso consecutivo Míchel Sánchez y en los jugadores, y Torres asegura que «se competirá como se hizo durante todo el año pasado». Los azulgranas se supieron adaptar a la nueva normalidad de junio y julio mejor que sus rivales y confían en navegar con viento de cola en tan incierta campaña.
