Hasta el jueves, en las oficinas del FC Barcelona prácticamente no está previsto atender a cuestiones relacionadas con el desplazamiento de su primer equipo a Huesca, donde juega el sábado a las 16.15. Tampoco en la mente de los jugadores azulgranas y de su entrenador parece que el duelo en El Alcoraz ocupe ahora mismo el primer plano de sus pensamientos. Con la Liga en el bolsillo y la jornada 32 enclavada entre la ida y la vuelta de la eliminatoria de cuartos de final de la Liga de Campeones con el Manchester United que arrancan mañana, la oportunidad de que la SD Huesca, a seis puntos de la salvación y necesitada de triunfos, pueda dar la sorpresa parece más propicia que si el encuentro se hubiese producido en otras circunstancias.

El triunfo de los culés sobre el Atlético de Madrid (2-0), el que había quedado como su principal oponente en la pelea por el título de Liga, les ha otorgado una ventaja de once puntos sobre los colchoneros y de trece con el Real Madrid cuando solo restan siete jornadas. Tres victorias y un empate les aseguraría el alirón, pero tampoco les urge lograrlas conscientes de que la presión recae ahora en sus oponentes y de que el calendario se les comprime. En trece días deben afrontar cinco encuentros. A los del Manchester United y el Huesca hay que añadir el recibimiento a la Real Sociedad y la visita al Alavés. Los dos conjuntos vascos se encuentran en la pelea por los puestos que dan derecho a jugar competiciones europeas.

Ya tras el partido con los de Simeone, el técnico blaugrana, Ernesto Valverde, apuntó la necesidad de gestionar los minutos de sus jugadores. "Tenemos que tirar de todo el equipo", expuso y, de hecho, para la cita de este miércoles en Old Trafford ha convocado a 22 jugadores, incluido Dembelé, aún sin el alta médica por su lesión en el bíceps femoral.

De este modo, todo hace indicar que el choque en El Alcoraz sería el elegido para que dé un respiro a algunos de sus futbolistas con más carga en sus piernas. Para Luis Suárez y Piqué el parón será obligado. Ambos vieron una tarjeta amarilla el sábado y deberán cumplir un partido de sanción al cumplir ciclo.

Solo la ausencia del delantero implica que los del Camp Nou pierden un importante caudal ofensivo. El uruguayo es el autor esta temporada de veinte goles en la Liga. Únicamente le supera su compañero Messi, que acumula 33 y cuyo concurso en la capital oscense, al menos desde el inicio, está en el aire.

La estrella argentina arrastra una pubalgia y con el Barcelona dispuesto a firmar el triplete, también se encuentra clasificado para la final de la Copa del Rey, el plan era no sobrecargarlo. Ya en su última cita liguera a domicilio, la visita al Villarreal, no ingresó en el terreno de juego hasta el minuto 60 en sustitución de Coutinho. Por el momento, este ejercicio en la competición de la regularidad tan solo se ha perdido dos encuentros. Fueron en las jornadas 10 y 11 frente al Real Madrid y el Rayo Vallecano a causa de una fractura en el radio de su brazo derecho que también le mantuvo en el dique seco en dos partidos de la fase de liguilla de la Liga de Campeones, ambos frente al Inter, y en la eliminatoria copera con la Cultural Leonesa.

Mientras que los catalanes van a pasar la semana viajando, el Huesca quiere preparar el choque a conciencia. Tras guardar descanso este lunes, regresa el martes a los entrenamientos a las 11.00 en el IFPE Montearagón. Francisco ha decretado que todas las sesiones se celebren a puerta cerrada en busca de la mayor concentración posible. Ya tras el empate del domingo ante el Levante manifestó que "hay que seguir, levantarse, competir y sacar los tres puntos con el Barça porque no queda otra". Sobre el papel, cara a cara en El Alcoraz estarán el primero y el último de la clasificación. Sobre el césped simplemente serán 22 jugadores de fútbol.