El punto de la SD Huesca, a la espera de los demás resultados

El empate cosechado ante el Espanyol queda a expensas de lo que ocurra en el resto de la jornada para poder valorarlo en su justa medida.

Etxeita celebra con sus compañeros el gol del empate ante el Espanyol.
El punto de la SD Huesca, a la espera de los demás resultados
EFE/Alejandro García

Un punto siempre es un punto y si es fuera de casa más, aunque cuando la situación es complicada lo único que alivia de verdad es sumar de tres en tres. El empate logrado este viernes por la SD Huesca ante el Espanyol dejó nada más acabar el encuentro la sensación de ser escaso, aunque a buen seguro cualquier azulgrana lo hubiese suscrito al descanso.

Quizá sea por ahí por donde hay que empezar a valorar el 1-1, por la capacidad de mejora que mostraron los de Francisco y por la continuidad que se le da a la buena trayectoria que venían arrastrando hasta el tropiezo del lunes pasado con el Athletic. En sus últimos cinco partidos los altoaragoneses solo han caído en una ocasión, han conquistado ocho puntos y únicamente han recibido dos goles, uno de penalti y otro de falta directa; ninguno en una acción de juego.

Ahora bien, no solo hay que alimentar el espíritu sino también el cuerpo. Si en la jornada anterior el Huesca entró en el terreno de juego conociendo los resultados de todos sus rivales y siendo consciente de que un triunfo le acercaría a tres puntos de la salvación, ahora ocurre todo lo contrario. Los jugadores, el cuerpo técnico, los directivos y los aficionados deberán estar todo el fin de semana pendientes de lo que ocurra en los demás estadios. El mejor de los escenarios dejará a los oscenses a cinco puntos de la línea de flotación y el peor, a ocho antes de recibir al Sevilla la próxima semana. Por lo pronto, sus compañeros en la carrera por la permanencia no lo tendrán fácil. El Rayo se mide al Getafe; el Celta, al Alavés y el Villarreal visita al Atlético de Madrid.

En tierras catalanas a los altoaragoneses les costó encontrar su mejor versión. Los primeros 45 minutos resultaron desalentadores. No porque los futbolistas no corriesen, que lo hicieron, pero sin dar mucho sentido a sus carreras. Era ya la quinta ocasión consecutiva en que Francisco repetía esquema táctico y es de suponer que éste ya no sorprende a los contrincantes, aunque esto no sea excusa, como bien se vio más adelante, para que los visitantes fuesen superados por el Espanyol, que consiguió una ventaja de un gol, que podría haber sido mayor.

La charla en el vestuario del técnico almeriense no debió de ser precisamente amable y, justo a continuación, el 1-1 de Etxeita funcionó como el mejor reconstituyente. A partir de ahí, el duelo se movió más dentro de los parámetros que escogió el Huesca. La posesión, por ejemplo, siguió siendo local y con datos muy similares a los de la mitad inicial, pero a parte de eso en poco más se parecía lo que se veía sobre el césped.

Tuvieron los blanquiazules ocasiones como el balón que estrelló en la madera Wu Lei, sí, pero también los de negro y verde se llevaron las manos a la cabeza en más de una oportunidad. "En la segunda parte hemos puesto una marcha más y nos da la sensación de que podíamos habernos llevado los tres puntos", reconoció Javi Galán. En la misma línea se movió Pulido, quien destacó que "hemos sabido corregir los errores de posicionamiento y hemos estado cerca de lograr la victoria en un campo complicado".

Rivera, lesión en el codo

Christian Rivera, que tuvo que ser sustituido en el minuto 67 por Yangel Herrera, presenta una lesión en el codo. Para saber el alcance exacto de la dolencia habrá que esperar a su evolución y a las pruebas que se le van a realizar. También dentro del apartado médico, este viernes por la tarde fue operado en Barcelona Pablo Insua de su rotura de ligamentos. El central gallego no podrá volver a jugar en lo que resta de curso.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión