Después de lo que había sucedido contra el Numancia, que le sacó los colores endosándole un 1-5 en el anterior amistoso estival, la Sociedad Deportiva Huesca ha mostrado este sábado en Tudela una versión mucho más sólida y se ha impuesto al Eibar por 1-2 (actuaba como visitante) en el que ha sido su primer encuentro preparatorio ante otro equipo de la máxima categoría nacional. Longo y Cucho Hernández han concedido una rápida ventaja con sus goles que pese a que ha menguado con el tanto de Kike García ha sido suficiente para obtener un triunfo que servirá para hacer crecer la confianza en el vestuario y asentar los mandamientos del técnico Leo Franco.

La mejoría en el capítulo defensivo ha resultado lo más destacado en el estadio navarro, con un Huesca que no ha exhibido las grietas del partido frente al Numancia y ha concedido pocas opciones al Eibar en ataque. La construcción del nuevo bloque azulgrana exigía otros parámetros en la cueva, que esta vez sí que ha sido un espacio de asfixia para el rival en lugar de una jornada de puertas abiertas como terminó siendo el amistoso ante los sorianos.

Se puede insistir en el habitual mensaje de cada verano: las conclusiones de los encuentros hay que tomarlas con precaución. Ni un resultado negativo o incluso muy negativo se convierte en un hecho definitivo, como tampoco lo es el haber obtenido la tercera victoria de la pretemporada ante un Eibar de Primera División. Claro que el diseño de la competición verdadera también requiere de momentos de mayor lucidez y en el caso del Huesca, tras perder contra el Osasuna (0-1) y el Numancia consecutivamente pedía un paso adelante y, sobre todo, poner sobre la hierba una sensaciones distintas a las que se palparon en los dos últimos partidos.

No ha sido un simulacro para la primera jornada de liga, en la que ambos equipos se medirán en Ipurúa, puesto que el Eibar ha acudido a Tudela sin muchos de sus titulares y el Huesca todavía está pendiente de incorporar unas cuantas piezas de relevancia para terminar de ensamblar su maquinaria. Los de José Luis Mendílibar habían jugado ya el viernes en la localidad riojana de Varea frente a Osasuna (1-1) y en los planes del técnico vasco para la dupla de amistosos estaba el repartir jugadores para uno y otro choque. Por eso nombres tan importantes en los esquemas guipuzcoanos como Escalante, Gálvez, Arbilla, Orellana, Diop, Sergi Enrich, Peña, Paulo o el portero Riesgo no han participado en el duelo contra el Huesca, que no ha contado con la presencia de los lesionados Chimy Ávila y Insua (más Musto que no puede jugar por su sanción).

Sobre el maltrecho césped del Ciudad de Tudela el Huesca y el Eibar han calcado sus dibujos. El clásico esquema 4-4-2, que para los altoaragoneses ha contado con Longo y Cucho Hernández como atacantes por delante de una línea medular con Melero y Aguilera en el eje y Gallar y Moi Gómez a la derecha e izquierda respectivamente. Por lo que se ha podido ver, entre los cambios de posición de los jugadores de banda, algunas pérdidas de sitio en labores de contención o malas conducciones, el preparador Leo Franco todavía debe ajustar bastante los mecanismos de su centro del campo, donde el enemigo dispone de demasiados espacios para generar juego en esas zonas grises de los azulgranas. En todo caso, el Huesca sigue en el período de pretemporada y es normal que se aprecien desajustes. Además, habrá que ver cuál es la idea a nivel táctico del entrenador argentino en el momento en el que el mercado estival de fichajes haya echado el candado y la plantilla quede configurada en su resultado final.

Longo ha probado fortuna a los seis minutos con una ‘folha’ seca que no ha encontrado portería. Ese aviso inicial del Huesca ha dado paso a una fase de mayor control por parte del Eibar, que sin embargo ha expuesto con claridad, a continuación, que en el verano suelen mostrarse con mucha más asiduidad las costuras. Así, en el minuto 20 Gallar ha aprovechado el mal posicionamiento de la defensa armera para filtrar un pase adelantado hacia Longo. El punta italiano ha enfilado portería y Yoel ha dudado si avanzar con firmeza o quedarse en el área y ha elegido la segunda vertiente. Mala opción, puesto que Longo ha podido regatearle y marcar a placer el primer tanto del choque (0-1).

Sin tiempo para reaccionar, otra acción en la que la defensa del Eibar se ha mostrado contemplativa y blanda ha servido en bandeja de plata el segundo tanto del Huesca. Lo ha marcado el delantero Cucho Hernández, recibiendo la asistencia de Longo y superando a Yoel en su media salida (0-2, minuto 22).

Como Mendilíbar no entiende de amistosos, se ha desgañitado desde la zona técnica exigiendo más atención a la línea de atrás y una mayor capacidad ofensiva para inquietar a un conjunto oscense que no se sentía agobiado. Lo ha hecho a su manera. Directo y con un vocabulario no demasiado fino. Parece que las súplicas del entrenador han surtido efecto, puesto que poco después ha tenido que lucirse el portero Werner con una estirado de foto ante el golpeo lejano del canterano eibarrés Ribeiro.

El Huesca, con un balón largo hacia Cucho Hernández, ha roto nuevamente la línea defensiva vasca, aunque en su movimiento de fuera a adentro ha conseguido rearmarse. Aunque la acción de ataque no ha terminado ahí, ya que Miramón ha recibido en el otro costado y su centro hacia el interior del área ha terminado con un zapatazo de Moi Gómez con marchamo de gol que finalmente ha rebotado en la zaga de forma salvadora.

El Eibar ha respondido de la mejor forma posible: Kike García aprovecha un robo de balón adelantado y se saca un latigazo ante el que Werner no puede opositar nada (1-2 en el minuto 34). Los guipuzcoanos han apretado en la última secuencia de la primera mitad, sin que su intención se haya convertido en un verdadero problema para el Huesca.

En la segunda parte, menos ritmo, apenas acercamientos dignos de mención y un volumen creciente de imprecisiones y contactos. En comparación con anteriores encuentros, menos cambios en ambos equipos, puesto que al acercarse a la entrada del campeonato los entrenadores van elevando el número de minutos para sus jugadores.

Se han visto algunas pruebas, como la posición de Semedo en el doble pivote o, de nuevo, adelantar a Miramón al interior cuando ha entrado al campo Akapo en el lateral derecho. El que ha vuelto a hacer de las suyas nada más salir ha sido Ferreiro. El gallego ha protagonizado una buena combinación en banda izquierda que ha terminado con un lanzamiento de Miramón sin la potencia suficiente para asustar a Dmitrovic.

El partido se ha ido consumiendo con el Huesca manejando más la posesión de la pelota y tratando de sacar partido a los espacios que le dejaban los vascos. De este modo se han dado algunas contras que han resultado improductivas en un epílogo en el que el esférico ha rondado con más asiduidad el área guipuzcoana. En definitiva, Leo Franco y los suyos han cosechado una victoria que puede catalogarse como justa y que es un buen punto de partida para rematar el período hacia el debut en Primera. Pero entonces, en Ipurúa, el Eibar tendrá poco que ver con el de este sábado en Tudela.

Ficha técnica

SD Eibar (1): Yoel (Dmitrovic, 45), Calavera, Bigas, Ramis, Cote, Elgezabal (Hervías, 70), Ribeiro (Sergio Álvarez, 70), Jordán, Bebé, Kike García y Charles (Pina, 78).

SD Huesca (2): Werner, Miramón, Pulido, Etxeita, Luisinho (Brezancic, 82), Aguilera (Semedo, 75), Melero, Gallar, Moi Gómez (Akapo, 80), Cucho Hernández y Longo (Ferreiro, 80).

Goles: 0-1 min. 20: Longo. 0-2 min. 22: Cucho Hernández. 1-2 min. 34: Kike García.

Árbitro: David Recio Moreno (Colegio Navarro). Amarilla al visitante Bigas.

Incidencias: Partido amistoso disputado en el estadio Ciudad de Tudela. Mucho calor y poco público en las gradas, fundamentalmente aficionados oscenses y vascos que se acercaron hasta la ciudad navarra. Se han producido dos parones, uno cada medio tiempo, para que los futbolistas pudieran refrescarse.