Álex Remiro: “Con este equipo cualquier cosa es posible”

El portero del Huesca, decisivo contra el Granada con una parada en el tiempo añadido que dejó los tres puntos en El Alcoraz, dentro de “un partido como los de antes, de los que hay que ganar con raza y casta”.

El portero Remiro, sobre el césped del Instituto Montearagón durante el entrenamiento que el Huesca ha completado este domingo tras vencer al Granada.
El portero Remiro, sobre el césped del Instituto Montearagón durante el entrenamiento que el Huesca ha completado este domingo tras vencer al Granada.
Rafael Gobantes

Hizo honor el portero Álex Remiro al sobrenombre con el que Jesús Valverde, speaker de El Alcoraz, le bautizó esta temporada. Y es que ‘El Santo’ fue más celestial que nunca cuando el partido contra el Granada estaba a punto de echar el cierre, gracias a una parada decisiva que permitió al Huesca quedarse en poder de los tres puntos. La victoria azulgrana ha disparado la confianza del vestuario, que tras enlazar el tercer triunfo sube enteros de cara a posicionarse nuevamente en zona de ascenso directo y buscar así la gloria sin rodeos, sin necesidad de jugarse los cuartos en un ‘play off’ siempre complicadísimo. “Claro que es posible, con este equipo cualquier cosa es posible”, ha defendido este domingo el meta navarro, tras la sesión de entrenamiento que se ha llevado a cabo en el Instituto Montearagón y que, para los titulares este sábado fue una suave sesión para recuperarse del gran esfuerzo acometido sobre un césped que terminó anegado por la lluvia.

Hubo varios momentos destacados en el choque frente al Granada. El último de ellos tuvo como protagonista a Álex Remiro, cuya figura se agigantó ante el delantero Rej Manaj, despejando a córner una pelota frontal, casi en área pequeña, que habría significado la igualada.“Es una jugada en la que yo no sé cuando va a tirar, por cómo estaba el campo y los rebotes que hay. Me hago lo más grande que puedo y tengo la suerte de que me da. No hago nada más”, ha explicado este domingo restándose méritos. Fue tal la trascendencia de su intervención que lo celebró como si el guardián de la portería oscense hubiera marcado un tanto. “Sí, porque sabía que una o dos iban a tener, tal y como estaba el campo. Es muy difícil aguantar así sin que te hagan una ocasión. Lo celebré como un gol porque consideraba que era un momento importante del partido”, ha señalado. Y tanto que lo era, dentro de lo que ha calificado como “un partido de los de antes, de los que hay que ganar con raza y casta. Por suerte pudimos sacar los tres puntos”.

Lo logró el Huesca pese a situarse por detrás en el marcador, por tercera jornada consecutiva. “El equipo está sobreponiéndose a los goles que nos meten. Tenemos esa capacidad de reacción, aunque también esa espinita que parece que nos tengan que pinchar. Pero estamos demostrando que el Huesca está capacitado para pelear. A ver hasta donde nos da”, ha indicado Remiro, quien ya avisó hace dos semanas, en plena crisis de resultados, que nadie debía dar a los altoaragoneses por muertos. “Es que al final el equipo tiene mucho potencial y mucho fútbol. Pasáramos una mala racha o no, es que no se puede dar por muerto a un equipo con esas características, no porque seamos nosotros”, ha asegurado.

Con el Rayo y el Sporting como acompañantes de una lucha a tres bandas con dos premios gordos por asignar, “nuestro trabajo es ganar y esperar. Si queremos optar al ascenso directo es la única opción que tenemos. Entonces, que no sea porque nosotros no hemos ganado. Por lo menos hay que estar ahí”, ha dicho el portero cedido por el Athletic Club, quien no tiene ni una sola duda de la capacidad del Huesca para discutir el teórico favoritismo de madrileños y asturianos. “Claro que es posible, con este equipo cualquier cosa posible”, ha manifestado con rotundidad. “Con el trabajo que hemos hecho durante todo el año, estas cinco jornadas nos van a deparar cosas buenas”, ha vaticinado.

Remiro ha querido dar las gracias a los aficionados, tanto por el recibimiento previo al partido como por aguantar la tormenta de la segunda mitad sin dejar de animar. “Se nota mucho. Y encima con la que estaba cayendo. Aunque seamos pocos, siempre nos apoyan, te reconocen en cualquier sitio y te tratan súper bien. Es de agradecer. La afición ya disfrutó mucho el año pasado, pero esta temporada hay una cosilla diferente y se ve en la gente”, ha opinado el arquero de Cascante, que ni siquiera en sus campañas en Bilbao había visto una tromba de agua igual. “Tan fuerte y en tan poco tiempo no. Hay un momento del partido en el que caía bastante agua y no sabía si se iba a seguir o no. El árbitro consideró que sí que se podía y por suerte para nosotros nos ha beneficiado”, ha comentado. Porque resultó clave que el Huesca remontara antes del descanso, ante los condicionantes externos que se dieron después. “Remontar un partido así… ya se vio que ellos no fueron capaces”, ha finalizado.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión