Una vez que el lunes se puso el broche a la entrada del extremo Álex Gallar y a la salida de Samu Sáiz al Leeds United de la Segunda inglesa, la Sociedad Deportiva Huesca centra ya sus miras en el que es el gran objetivo estival para el conjunto azulgrana: la caza de un delantero centro contrastado.

El gol, la salsa del fútbol, se paga caro. Por este motivo los fichajes de los puntas suelen ser las operaciones más enrevesadas, ya que algunos de los nombres de mayor atractivo aparecen en la agenda de muchos de los equipos de la categoría. La competencia es máxima y surgen igual otros factores, dinero al margen, que pueden decantar la decisión final del delantero de turno.

En ese sentido el Huesca confía que el crecimiento que ha experimentado en lo deportivo en el pasado ejercicio 2016-2017, con su presencia en el ‘play off’ de ascenso, le ayude a la hora de convencer a un goleador habitual de las bondades del proyecto azulgrana.

Claro está que solo con palabras bonitas es complicado acometer según qué tipo de fichaje, pero es que el Huesca ha dado también un pequeño salto en el capítulo económico. Los resultados cosechados en la última temporada –sexta plaza– han aportado un buen pellizco a las arcas e incluso el techo de gasto para la plantilla ya es a día de hoy de 4,2 millones de euros. En estas fechas del pasado verano la Liga había impuesto a los altoaragoneses un límite de 3,5 millones de euros para pagar a sus jugadores.

El sello Huesca ha tomado consistencia en Segunda División y esa es una circunstancia que se ha apreciado en el interior del club, por el auge de los ofrecimientos que han ido llegando a las dependencias de El Alcoraz. Ese interés al alza en lo referente a los colores azulgranas ya ha tenido consecuencias, como el fichaje del técnico Joan Francesc Ferrer Sicilia ‘Rubi’, preparador de buen cartel en el panorama futbolístico nacional.

Que la figura del ‘nueve’ señale el camino de los movimientos todavía por producirse en el Huesca no quiere decir que haya prisa por conseguirlo. Y es que en estos momentos el equipo oscense cuenta ya con 22 jugadores para el primer equipo, más cuatro que vuelven de cesión y algún otro futbolista del filial que era asiduo de los entrenamientos con los ‘mayores’ en el pasado curso.

La delantera, eso sí, es la línea menos poblada ahora mismo en el Huesca. El único ariete seguro es el colombiano de 18 años Cucho Hernández, uno de los cinco fichajes que se vestirá de azulgrana tras ser cedido por el Watford inglés. Boris Cmiljanic vuelve después de un infructuoso préstamo al Levante Atlético, al igual que sucede con Agus Alonso y su paso por el Badalona.

Desde que en la temporada 2008-2009 se diera el bombazo de Rubén Castro, la del ‘nueve’ ha sido una demarcación bastante discreta en su producción para el Huesca, durante sus siete temporadas en Segunda. Es lo que sucedió en el último ejercicio, cuando entre los delanteros que conformaron el plantel anotaron solo 11 de los 53 goles totales que marcaron los altoaragoneses en los 42 compromisos ligueros.

El Huesca desea contar en el curso 2017-2018 con al menos un ‘nueve’ que ofrezca garantías por su recorrido anterior como goleador. De este modo, la entidad oscense apunta alto y, por ejemplo, anda tras los pasos de Rodri, que finalizó contrato en el Córdoba, y Alfredo Ortuño. El ex zaragocista, cedido este pasado año al Cádiz, es propiedad de Las Palmas hasta el 30 de junio de 2019.

Ambos jugadores pretenden encontrar acomodo en Primera División y cuentan también con importantes propuestas del extranjero. El Huesca se mantiene atento. Lo que es seguro es que la intención de los mandatarios azulgranas es hacer un esfuerzo extra para culminar un gran fichaje en la zona de vanguardia.

Dependiendo de lo que opine Rubi sobre el resto de atacantes que ahora figuran en nómina, se llevará a cabo otra llegada para la parte de arriba. A priori esta parece la opción natural.

Pero para que se produzcan los últimos movimientos en el baile estival de fichajes el Huesca tendrá que abrir la puerta de salida a alguno de los integrantes del vestuario. Y es que aparte de la marcha de Samu Sáiz al Leeds el único de los jugadores con contrato que ha cambiado de aires ha sido el delantero Borja Lázaro (al Alcorcón). El club escucha ofertas por jugadores como el portero Javi Jiménez o el internacional venezolano Alexander González.

La de delantero podría no ser la única posición a reforzar. Sin Samu, el único media punta específico es el veterano Camacho, aunque tanto Vadillo como Gallar tienen condiciones para salir de la banda izquierda y actuar como enganche.

Seis días para el regreso

Encara ya la recta final de las vacaciones la plantilla del Huesca, que regresará al trabajo el próximo martes 18 de julio. Son seis días por delante antes de que el técnico Rubi comience su etapa como azulgrana, que tras un arranque en la capital oscense seguirá con la concentración de Benasque. En la localidad pirenaica permanecerá el Huesca entre el 23 de julio y el 2 de agosto, disputando entonces sus primeros amistosos: el 29 de julio ante el Fraga y el 30 frente al Monzón.