Aguilera, espectador en el partido contra el filial del entrenamiento

Todas las miradas se centraban en la evolución de Juan Aguilera en el entrenamiento de este miércoles del Huesca, y el centrocampista madrileño no llegó ni a vestirse de corto. Desde el banquillo del campo de entrenamiento del IES Pirámide, presenciaba en compañía de Nagore el encuentro contra el filial, el Almudévar, que suponía la sesión del equipo azulgrana desde las 11.00.

El club no ha remitido todavía ningún parte médico que permita conocer el alcance de sus molestias, ya que no será hasta este jueves por la mañana cuando se le realicen algunas pruebas que puedan determinar si será baja para el importante partido contra el Tenerife de este sábado en El Alcoraz.Este contratiempo se le añade a Anquela al de tener que buscar sustituto para su portero titular, sancionado esta jornada.

Al margen de ello, el equipo se ejercitó este miércoles -ecuador de la preparación-, enfrentándose a los jugadores del filial, como es habitual en la planificación semanal, reservando un día para este partido. Siguiendo la línea de otras ocasiones, el técnico dividió al conjunto en dos onces, mezclando teóricos titulares con suplentes. El encuentro finalizó con un 3-1 para la primera plantilla. Un 0-1 con gol en propia de Jair cerró el primer tiempo, y tras el cambio de jugadores, un tanto de David López y dos de Vinícius Araújo ya en el segundo remontaron el marcador.

Además del ya citado Aguilera, en el banquillo vestido de calle, el entrenador no pudo contar tampoco ni con Bambock ni con Camacho, que no se desplazaron hasta el IES Pirámde. El francés había participado en sesiones anteriores con el resto del equipo, lo que hacía pensar que ya se encontraba recuperado, e incluso podía ser una opción para suplir la baja de Aguilera, después de jugar de inicio contra el Rayo.