Carlos David, jugador de la Sociedad Deportiva Huesca, ha declarado que "las decisiones arbitrales no se pueden controlar", en referencia a la polémica vivida con el colegiado Óliver de la Fuente Ramos, árbitro del partido de la pasada jornada entre el equipo altoaragonés y el Real Oviedo.

En dicho encuentro fue expulsado Íñigo López y señalado un penalti por una acción del propio Carlos David en las que, a juicio del conjunto oscense, el colegiado se equivocó.

El jugador del conjunto altoaragonés ha explicado que con las decisiones de los árbitros no se puede hacer nada: "Sientes impotencia, pero lo único que queda es seguir trabajando ya que tenemos que ganar los partidos por méritos propios".

La expulsión de Iñigo López y la quinta tarjeta amarilla que vio en el último partido Carlos David hacen que los dos centrales titulares del equipo no puedan jugar el próximo partido contra el Llagostera, aunque el club ha presentado alegaciones al acta arbitral.

Carlos David ha restado importancia a su baja y a la de Íñigo López porque considera que sus sustitutos lo hará bien: "Jesús Valentín ya entró en el último encuentro y trabaja bien y Cristian tiene experiencia y calidad, así que nosotros confiamos en ellos".

Para el partido del próximo sábado en el campo del Llagostera, no estarán previsiblemente, ya que no se han entrenado, el portero argentino Leo Franco y el delantero centro costarricense Jonathan Moya, en un encuentro en el que se hace imprescindible sumar puntos para el conjunto azulgrana

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Así lo reconocía el jugador extremeño: "llevamos tres partidos sin ganar y ante el Llagostera es un partido clave ya que hay que sumar de tres en tres puntos ante un rival directo que está a tres puntos de nosotros, aunque sabemos que en su casa sacan los puntos".