El Huesca llegaba este martes a un acuerdo con el defensa Iñigo López para que se sume al proyecto deportivo del club oscense en su vuelta a la categoría de plata. La experiencia en Primera División del jugador, sumada al potencial físico que se le presume con 1,85 de altura, han sido determinantes para que el Huesca, que describe al futbolista como “extraordinario central”, se decantará por López para reforzar el centro de su zaga.

A su vez, el proyecto deportivo y la seriedad económica que presenta el club oscense ha hecho que el jugador haya preferido la oferta presentada frente a otras con las que contaba de equipos de Primera y Segunda División, como reza el comunicado emitido por el Huesca.

Iñigo López, de 32 años, cuenta con una dilatada experiencia en el fútbol profesional, ya que ha vestido la camiseta de equipos de Primera División como el Granada, el Celta o el recién descendido Córdoba, donde jugó la pasada compaña.

También participó en el ascenso del Alcorcón a Segunda en 2010 y durante la temporada 2013 formó parte del PAOK Salónica griego, aunque solo durante ocho meses, ya que esa misma campaña fichó por el Celta en el mercado de invierno.

El jugador llegará a la ciudad este jueves para participar ya en los reconocimientos médicos junto al resto de sus compañeros y empezar a entrenar el viernes.