La portería, todavía en el aire

El guardameta del Huesca Dani Jiménez trabajó ayer con mucha precaución y
es duda para el partido contra el Rayo B

Aitor Chueca –de azul–, corriendo junto a sus compañeros en un entrenamiento
La portería, todavía en el aire
Rafael Gobantes

El guardameta titular de la Sociedad Deportiva Huesca, Dani Jiménez, continúa trabajando entre algodones para intentar llegar en condiciones de jugar al partido de este domingo en el campo del Rayo Vallecano B, que será a las 12.00.


Jiménez, que hasta ahora ha disputado todos los minutos posibles en Liga y Copa del Rey, arrastra molestias en los aductores desde la semana pasada y ya actuó algo mermado por esta razón ante el Atlético de Madrid B, en el encuentro del pasado domingo. En el choque frente al filial colchonero pudo hacer algo más en los dos goles que encajó.


En declaraciones de esta misma semana, Jiménez admitió que "sentía un dolor constante" durante el partido que le hacía estar "casi más pendiente" de no lesionarse que del juego. Unas molestias que sobre todo le perjudicaban "en el momento de las arrancadas". Si en el entrenamiento del pasado miércoles el grueso del trabajo de Jiménez fue hacer bicicleta estática, en la sesión de ayer celebrada en el campo del IES Pirámide el guardameta andaluz alternó suaves ejercicios con balón, minutos de carrera continua y mucho estiramiento en la zona afectada, en ocasiones ayudado por el preparador físico Raiko y con la supervisión del fisioterapeuta Lalo Vicente.


Por lo presenciado en la sesión de ayer se puede decir que el concurso del meta sevillano en el encuentro frente al Rayo de pasado mañana es como mínimo dudoso, ya que a 72 horas del próximo partido su exposición al trabajo es todavía muy prudente y, sobre todo, porque el propio protagonista ha reconocido que al alinearse contra el Atlético arriesgó "por el colectivo, pensando más en el equipo que en lo individual", ya que se trataba de un duelo "muy importante para nosotros después de haber perdido ante el Madrid".


El escenario no es sencillo. El jugador está dispuesto a asumir cierto riesgo, pero tampoco quiere exponerse a la posibilidad de tener una rotura que le incapacite por un tiempo prolongado.


En la actualidad, el relevo en la portería lo encarna Aitor Chueca, guardameta procedente del Almudévar, que en diciembre cumplirá 21 años. El portero zaragozano está inédito en lo que va de temporada.


Con Jiménez en pleno proceso de recuperación, los minutos dedicados ayer al partidillo con petos contaron con el citado Chueca en una portería y Fabián, meta colombiano, segundo de Larrosa en el Almudévar, en la otra.