Adán se reivindica, Vallejo pide sitio y Javi Álamo muestra su mejor versión

El nuevo Real Zaragoza ha dejado una buena imagen en su presentación ante La Romareda, pero sobre todo un puñado de nombres propios que han despertado el interés de la afición en este encuentro frente al Villarreal. 

Uno de los jugadores más destacados ha sido Adán Pérez, futbolista al que le han señalado la puerta de salida y que sigue empeñado en no marcharse. Este domingo marcó el único gol del Real Zaragoza y fue despedido con una gran ovación, aunque las restricciones de la LFP respecto al número de fichas profesionales -el club aragonés solo puede tener 18- ha complicado mucho la continuidad del canterano, que podría salir cedido.

Pero el mejor ha sido Javi Álamo, uno de los mejores 'fichajes' del Real Zaragoza durante este verano. Había opciones de que el extremo canario saliera del club, ya que su ficha era algo más alta de lo que podía permitirse la SAD, pero finalmente llegaron a un acuerdo y el futbolista aceptó -por segunda vez- bajarse la ficha y renovar con el equipo blanquillo. El atacante quiere ser importante en este Real Zaragoza y, con el brazalete de capitán, firmó un gran partido frentre al Villarreal. El canario fue la referencia ofensiva del conjunto de Víctor Muñoz y no solo demostró que está en su mejor momento, sino que esta temporada será -o, al menos, debería serlo- uno de los jugadores más importantes del club.

Otro jugador que merece mención aparte es el joven Vallejo, quien a sus 17 años firmó un encuentro digno de un central experimentado. El canterano, todavía juvenil, se entendió bien con el uruguayo Cabrera y demostró que no solo es un central de futuro, sino también de presente. Serio en el corte, sereno y con buena salida de balón, Vallejo pide oportunidades, aunque no lo tendrá fácil con Rubén, Mario y Cabrera por delante. No obstante, esperará sus oportunidades en el filial. Seguro que llegarán pronto.

Su compañero en el centro de la defensa, Cabrera, también generó confianza en su primer partido con la camiseta blanquilla, y los dos laterales, Rico y Fernández, cumplieron frenando las numerosas internadas del Villarreal. El que dejó abundantes detalles fue Ruiz de Galarreta, centrocampista cedido por el Athletic y cerebro del Real Zaragoza. El jugador todavía necesita tiempo para acoplarse al equipo y asimilar las ideas de Víctor Muñoz, pero apunta a convertirse en un jugador determinante para el conjunto blanquillo.

Otro Muñoz, David, también juvenil, dio una lección de ganas y desparpajo ante un equipo de entidad como es el Villarreal. El delantero tiene que crecer y necesita experiencia, pero se mostró luchador y con descaro. También dejó buenas sensaciones Whalley, el portero en el que confía el técnico para esta temporada, y se olvidó de los nervios que padeció en su debut con el primer equipo hace apenas unos meses.