El exdirectivo del Real Zaragoza Javier Láinez, que promueve desde hace semanas una iniciativa para comprar la entidad zaragocista, se ha posicionado con claridad como seria alternativa para adquirir el  paquete accionarial que es propiedad de Agapito Iglesias. Hoy mismo está prevista una reunión entre el empresario zaragozano y el propietario de la entidad, en el que ambas partes pretenden aclarar las condiciones de la venta.

Y, de forma paralela, sigue adelante la iniciativa que lidera Mariano Casasnovas, que abandera a un grupoo de empresarios aragoneses y que se ha posicionado en los últimas días como clara opción de compra de la entidad blanquilla. 

El grupo vive un compás de espera y calma previa a un desenlace por el que ya suspiran todas las partes: para el cierre del acuerdo o el cierre del capítulo. El grupo de empresarios que lidera Mariano Casasnovas afronta con moderado optimismo la negociación que mantiene abierta para concretar la operación. La diversidad de frentes que tiene abiertos la negociación y la dificultad para concretarlos obliga a llevar a cabo pasos cortos y avanzar con mucha dificultad.

A pesar de todo, los impulsores de la iniciativa de compra muestran un espíritu positivo. No dan marcha atrás al proyecto y siguen adelante para intentar cerrar el acuerdo. 

La opción que lidera Casasnovas va trabajando en el proceso de negociación. A la dificultad natural de sacar adelante la operación se unen también el entramado de relaciones entre los propios promotores, que se muestran expectantes a cada paso que se lleva a cabo. Los novedades surgen muy poco a poco y los empresarios también son conscientes de que, además de su idea, hay otras que también valora Agapito Iglesias.

La 'conexión mexicana'

Hace ya varias semanas que comenzaron los contactos entre Javier Láinez y Sixto Genzor, cabezas visibles de la operación, y el entorno de Agapito Iglesias. Mantuvieron primero una reunión con Javier Bazaco, hombre de confianza del constructor soriano, que no fue mal vista por el dueño del Real Zaragoza. Además, han mantenido las puertas abiertas con las instituciones, en donde han encontrado respaldo para sacar adelante la iniciativa.

Con el abanico ya abierto, la cuestión clave era la económica: la propuesta que había impulsado Láinez ha tendido un puente con México, desde donde ha logrado el compromiso de la inversión de un empresario azteca. En principio, las garantías parecen convencer a Agapito Iglesias, que está dispuesto a cerrar hoy mismo la operación.

Es verdad que el soriano pone condiciones. Y no acaba de ver claro que Javier Láinez, quien abandera la propuesta, se haga cargo de la Presidencia de la entidad. Prefiere que sea otra persona la que se ponga al frente del Real Zaragoza. Y, además, como ya ha anunciado en otras ocasiones, plantea dejar en sus puestos a hombres que han ocupado cargos claves en el Real Zaragoza; en concreto, Paco Checa y Luis Carlos Cuartero.

Esta opción no resta consistencia al grupo de empresarios vinculados a Mariano Casasnovas, que sigue en el mano a mano por hacerse con el club.

Más dificultades ofrece la candidatura que encabeza Mateu Alemany. El gestor, que tiene el respaldo y el visto bueno de la Liga de Fútbol Profesional (LFP) y del Consejo Superior de Deportes (CSD), llegaría en similares condiciones a las de García Pitarch, como director general. Pero necesitaría encontrar a un inversor para formalizar la operación de compra. Alemany busca apoyos empresariales, pero su proyecto se complica, ya que el que invierte no gestionará de forma directa el club.

Aún existen otras alternativas, aunque resultan más complicadas de formalizarse. Más aún ante la inmediatez que exige Agapito Iglesias, que quiere poner fin cuanto antes a su etapa como propietario del Real Zaragoza.

En principio, y si no existe un giro inesperado de los acontecimientos, Agapito Iglesias dejará de ser en las próximas jornadas el máximo accionista del Real Zaragoza. Javier Láinez y el grupo de Mariano Casasnovas son candidatos a tomar el relevo.

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