La semana que arranca hoy anuncia agitación en el Real Zaragoza. La inminente salida de Hélder Postiga rumbo al Valencia y la posible marcha de Pinter al Panathinaikos van a permitir que el club aragonés, por fin, y tras varias semanas atado de pies y manos, se libere algo del yugo de la LFP. La Liga, en su nueva política de control y regulación presupuestaria de los clubes de Segunda, ha tenido bloqueadas las operaciones de entrada del Zaragoza: antes de fichar y dar de altas nuevos contratos, debía soltar lastre económico. El traspaso de Postiga al Valencia lo va a permitir. El Zaragoza va a ingresar casi 4 millones de euros (la cifra final dependerá de variables por objetivos) por el delantero portugués. La operación está pendiente del remate final y las firmas.

Todos los detalles del acuerdo entre clubes están ultimados y también del Valencia con el jugador. Solo resta que el club levantino cierre la venta de Soldado al Tottenham. Anoche, se limaban los últimos puntos de la operación y hoy se espera el anuncio oficial. En ese momento, Postiga tendrá vía libre hacia Valencia. Además del ingreso por la venta del portugués, el Zaragoza se librará de su elevado salario (1,7 millones), factor esencial para aliviar la masa de costes del club y abrir espacio a nuevos contratos.

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